Portal Martinista del Guajiro
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Breve Reseña Histórica y Fundamentos
del Martinismo
El Martinismo está estrechamente ligado a la Logia
Rosacruz y a la Masonería. Para comprender, en cierto sentido el
significado profundo del Martinismo, es necesario conocer las órdenes
y el movimiento anterior al surgimiento de éste. En el siglo XVIII
a comienzos de la Edad Contemporánea, surge la figura de Joaquín
Martínez De Pasqually. En esta época la Rosacruz de Oro realiza
actividades en común con la Franc Masonería. Martínez de Pasqually
va a realizar actividades en las logias masónicas de Aviñon, Marsella,
Montpellier, Foix y Tolosa. En 1754 funda el capítulo de los jueces
Escoceses y luego, en 1760, instala un templo de los verdaderos
Caballeros Masones Elegidos Cohén del Universo, Así sucesivamente
se va configurando una serie de templos en los principales países
de Europa.
En el año 1766 Martínez de Pasqually abre en pleno París un nuevo
Templo Cohén, con la ayuda de Juan Bautista Willennoz, Bacon de
la Chevaleríe y el Conde de Lurignan. Dos años más tarde aparece
la figura de Louis Claude de Saint-Martin quien se encuentra con
Martínez de Pasqually; pronto se convierte en su secretario más
apreciado. La Orden de los Elegidos Cohén cada vez crece más; se
prestigia en Europa y surgen templos en varias ciudades. Durante
este período la Franc masonería y los Rosacruces utilizaban las
mismas logias; al parecer trabajaban unidos. Joaquín Martínez De
Pasqually, el 6 de mayo de 1772, viaja a Santo Domingo donde va
a formar varios Templos Cohén. Escribe su "Tratado de la Reintegración
de los Seres" el que no alcanza a terminar.
Desde América mantuvo contacto permanente con sus discípulos
en Europa. Envió constantemente instrucciones de curso y rituales.
Después de dos años muere en Puerto Príncipe el 20 de septiembre
de1774, habiendo sido durante toda su existencia un hombre ocultista
de los más notables de su época. A la muerte de Joaquín Martínez
De Pasqually, la Orden de los Elegidos Cohén decae, como ha sido
en toda la historia. Los templos de Rochela, Marsella y Libourne
se fusionan con la Gran logia de Francia. Las tendencias se dividen;
unos se unen con las órdenes masónicas tradicionales más operativas
y otras desean un camino más místico, más interior y se convierten
en adeptos del Martinismo.
Juan Bautista Willermoz, nacido el 10 de julio de 1730, en Saint-Claude
(Franco Candado), se transforma en guía del grupo de tendencias
más operativa; posee una sólida experiencia esotérica y una amplia
formación especialmente en la Masonería. Fue Venerable Maestro a
los 22 años. En 1752 fue consagrado como Maestro Masón y en el año
1762, pasa a ser el preceptor de la Gran Logia de los Maestros Regulares.
Al año siguiente junto a Pierre-Jacques, fundó el Soberano Capítulo
de los Caballeros del Águila Negra Rosacruz, cuyos trabajos estaban
basados en la alquimia. Esta orden trabajó en unión de ideas y pensamientos
con la Rosacruz de Oro de Alemania.
Willennoz fue iniciado en el seno de la Orden de la Estricta
Observancia Templaría, en el año 1774, dirigida por el príncipe
Federico de Brunswick y el barón Von Hund. En el año 1776 participa
en la creación del Directorio Escocés de la Provincia de Auvernía
de la estricta Observancia. Finalmente, participa en la creación
de la Orden de los Caballeros Bienhechores de la ciudad Santa, con
la que queda ligado hasta sus últimos días de vida; fallece el 20
de mayo de 1824.
La obra de Willermoz actualmente sigue dando luz, vida, y amor
a las distintas logias martinista en el mundo…
Saint-Martin nació en Amboisse, Francia, el 18 de enero de 1743.
Su niñez, es poco conocida, sólo se sabe que su madre murió a una
edad temprana cual habría influido en la formación de su personalidad,
en especial lo relativo a su excesiva sensibilidad y constante búsqueda
de respuestas, así como la dulzura de su refinamiento bondadoso.
Las relaciones con su padre fueron difíciles debido a las inquietudes
de este adolescente a tan temprana edad, tuvo un hermano del cual
tampoco se sabe mucho. Cuando pequeño debe haber sentido la falta
de su madre, aunque se dice que desde niño demostraba una gran fortaleza
mental. Claude de Saint-Martin dice en sus cartas, que trató de
cumplir sus obligaciones para con su padre a costa de gran sacrificio;
de este modo se reprimió en si mismo realizar sus propios proyectos.
Después de haber terminado su instrucción
En su vida tuvo muy buena afinidad con el supuesto, pero nunca
se casó; decía que había nacido exclusivamente para la vida espiritual.
En su vida aparecen. Varías damas importantes en esa época, entre
ellas la duquesa de Bourlon, Madame Bry, Madame de Saint Dicher
Madame Polomien, Madame de Bríssac y otras. Quizás la mujer que
más influyó en él, fue Madame Boecken, debido a su gran espiritualidad
e inteligencia. El conocía muy bien las obras de Jacobo Boehme,
de aquel extrajo muchas de sus enseñanzas.
Le tocó vivir la Revolución Francesa, por lo cual pensaba con
verdadera compasión de la gran cantidad de personas que sufrían.
Según Cazotte, que fue uno de sus amigos más íntimos, Saint-Martin
nunca trató de cambiar el destino de los acontecimientos. Cuando
la muerte y la destrucción cayó en Francia el trato de ayudar a
los necesitados, sin temer por su pronta vida. Finalmente lo obligaron
a irse a Amboisse donde permaneció hasta su muerte, el 13 de octubre
de 1803, cuando había cumplido los 60 años de edad.
La formación espiritual de Claude de Saint-Martin, se fue complementando
gradualmente hasta transformarse en un Gran iniciador creador y
fundador del Martinismo. Eligió el camino del corazón y del amor,
y se transformó en un extraordinario Teurgo, lo que le permitió
una íntima y estrecha relación con la Divinidad. Huyó de la pomposidad
y lujos de las logias; buscaba una conexión directa de simple expresión
en las experiencias de su alma. Fue así corno nació el Martinismo.
Saint-Martin tuvo contado con el llamado "Agente Desconocido"
de quien recibía enseñanzas de las que quedaba extraordinariamente
impresionado. En esa época escribe su primer "Libro de Errores y
de Verdad"; firmó este libro con el seudónimo de "El Filósofo Desconocido"
y su obra fue muy comentada en los círculos de los iluminados.
Su tesis era que, mediante el conocimiento de su propia naturaleza,
el hombre puede obtener el conocimiento de su creador y de toda
su creación; como también los fundamentos de las Leyes del Universo.
Saint-Martin fue un iluminado y deseaba ardientemente compartir
los conocimientos recibidos; pero sólo a aquellos que estuvieran
preparados para recibirlos y comprenderlos. A lo largo de su vida
pudo encontrar lecciones ocultas que lo guiaban hacia la perfección
y consolidación de su ideal.
Otro de sus libros fue "El Escenario Natural" que habla sobre
la relación entre la Naturaleza, el hombre y Dios".
Saint-Martin fue enemigo del ateísmo y del materialismo en todas
sus manifestaciones, los que eran muy comunes en la Europa de esa
época. Muchos le empezaron a llamar el Filósofo Desconocido y su
característica predominante era la de unir el conocimiento del mundo
invisible con el de la mente. Las enseñanzas de Saint-Martin se
difundieron a partir del año 1785 en Francia, Inglaterra y Rusia
preferentemente. En Londres conoció a Law, apodado el místico y
también M. Belz, el famoso clarividente; más tarde se hizo amigo
de Zinovoew y del príncipe Galitzne quien introdujo el Martinismo
en Rusia. Es necesario recordar que esta escuela fue muy perseguida,
especialmente en Rusia, debido a la ignorancia de sus metas y doctrinas,
y a las conductas erradas de algunos martinistas que habían recibido
las enseñanzas de Saint-Martin.
Con respecto a la influencia de la Revolución Francesa, Saint-Martin
planteaba que la estructura social, cualquiera que ella fuese, no
puede ser perdurable si ésta sólo satisface el orgullo y los intereses
personales de los individuos, y no está basada en el conocimiento
trascendental del ser humano, de acuerdo a las leyes divinas que
deben operar en todo orden. Un legislador debe tener una profunda
comprensión de la naturaleza íntima de cada persona; de lo contrario
tarde o temprano terminarán en graves errores, como lo fue la Revolución
Francesa.
En el ensayo "El Cocodrilo " , Saint-Martin describe la lucha
entre las fuerzas del bien y del mal.
Muestra como a través de las cosas sagradas se escapaba el mal,
el que tiene un espacio y tiempo que puede ser muy bien reconocido
por señales evidentes que no pueden confundirse. El bien y las cosas
sagradas siempre saldrán victoriosos sobre el mal; pero, para lograrlo
debe existir un combate permanente. Las doctrinas de Saint-Martin
se esparcieron rápidamente por todo el mundo, bajo el nombre de
orden Martinista. El estaba convencido que la mejor modalidad de
trabajo era la iniciación individual. Cada miembro era cuidadosamente
elegido y se le iniciaba en los principios de la orden. El iniciador
le daba los trabajos a realizar, los que estaban de acuerdo con
su particular modo de ser y su desarrollo o ritmo. El camino en
este sentido era más largo, pero a la vez mas seguro; la doctrina
permanecía pura e inalterable ganando fuerza y expresión. En su
escrito "Nuevas Revelaciones", explica la relación entre el ser
humano y su Creador; con esto el poder ilimitado y la libre determinación.
Estos rasgos, aunque llevan consigo reflejos de Dios pueden trabajar
en perfecta concordancia con las leyes universales, acercándose
a la anhelada felicidad.
Estas mismas facultades, pueden interrumpir la unión con el Creador
y someter al ser humano a una vida común sin trascendencia. Sin
embargo, el ser humano puede desarrollar sus aptitudes para elevar
su nivel de vida. Saint-Martin consideraba la unidad como lo esencial
de le cual todo emana. Así, todo ser humano en cualquier plano nivel
de evolución está expuesto a la primera causa, que es la unidad:
así como los rayos solares que aunque viajan muy lejos siempre mantienen
su unidad con la luz, central que emana del Sol. Saint-Martin planteaba
el deseo de unir en el nombre del amor y considera vital la hermandad
en la vida social de los humanos. Consideraba que la igualdad era
una constante matemática; un resultado del orden y la armonía. Sus
fundamentos esenciales se basaban en considerar la hermandad como
factor de amor que regula las relaciones humanas entre la justicia,
la caridad, la fortaleza y la debilidad.
La maldad la explotación y la tiranía no pueden permanecer a
la luz del amor fraternal. Un símbolo en la doctrina de Saint-Martin
es el círculo y los rayos que interfiere. Su constante relación
entre la circunferencia de un círculo y los rayos, está expresada
en términos matemáticos por la letra N; ya sea porque las dimensiones
del círculo sean de milímetros o de millones de kilómetros. Se puede
decir entonces, que las circunferencias de los círculos tienen una
relación equitativa entre ellos. Lo mismo ocurre con el ser humano,
la circunferencia es su bien; la luz es el límite que el ser humano
no puede quebrantar. La luz o la superficie descrita por su rayo
en su revolución alrededor del centro, es su área de responsabilidad
que según aumenta la circunferencia el círculo también lo hace;
y así como crecen los derechos del hombre, crecen también en proporción
sus responsabilidades.
La imposición de responsabilidades se enfrenta con oposición,
por lo cual no puede haber conciliación entre la justicia y la caridad;
sin embargo, será todo posible si se fundamenta la hermandad en
el altruismo y la solidaridad. La libertad está basada en el cumplimiento
de la ley. Ningún ser humano puede transgredir la ley sin, recibir
como consecuencia de este acto una pena, aunque no sea consciente
de ello. El ser humano debe ser consciente de sus derechos y responsabilidades
como alma viviente, sólo cumpliendo con estos preceptos, podrá ser
realmente libre y cumplir con su tener que ser en la vida. El anhelo
de todo Martinista es ayudar a lograr la unidad de toda la humanidad.
Saint-Martin fue un profundo pensador con raíces cristianas y deseaba
ardientemente construir bases absolutas para una nueva humanidad,
basada en el amor a Cristo, cual debía guiar toda la vida del ser
humano. Para la Orden Martinista es la Caballería Cristiana, uno
de sus miembros debe estar dispuesto a trabajar.
Consigo mismo en forma interna y pasar por todas las etapas de
un renacimiento espiritual cada vez más profundo, hasta el punto
de alcanzar el nacimiento del Cristo interno.
La principal responsabilidad de cada miembro de la orden es la
de servir a la humanidad en forma completa y perfecta, sacrificando
su propia individualidad personal en bien de los demás. El Martinismo
anuncia el advenimiento de Cristo en cada ser humano para la redención
de la humanidad.
La Orden Martinista estuvo asociada a la Federación universal
de Órdenes Secretas Iniciáticas "FUDOSI".
El lema de los Martinistas elegido por el Filósofo Desconocido
(...)
LA ÚNICA INICIACIÓN QUE YO RECOMIENDO
Y BUSCO CON GRAN PASIÓN DE MI ALMA,
ES QUE PODAMOS ENCONTRAR EL CORAZÓN
DE LA DIVINIDAD E INDUCIRLO A QUE ENTRE EN NOSOTROS.
ASÍ SEREMOS PERFECCIONADOS
Y NOS UNIREMOS A LA OBRA
DEL CREADOR PARA LA ETERNIDAD".
No existe otra forma de obtener esta iniciación si no se hace
un trabajo interno, real y profundo en lo personal. Con respecto
a la obra de Saint-Martin, Honoré de Balsac fue Martinista e iniciado
por Henri de Latouche, al que reconoce como gran iniciado, también
se relacionó con el príncipe Galitzine de Rusia quien ayudó a la
difusión del Martinismo. Aún se distingue la influencia de Saint-Martin.
Atacó duramente el catolicismo.
En la actualidad el Martinismo ha vuelto a encontrar la vía inferior,
el camino de la unidad por el espíritu y corazón. LA base de la
iniciación Martinista es el desarrollo del amor (caritas). Los fundamentos
de la filosofía del "Filósofo Desconocido " , están basados esencialmente
sobre las teorías de los egipcios y de la escuela pitagórica. Contiene
en sus simbolismos la clave que abre el mundo de los misterios de
la creación, el que es secreto inefable, incomunicable y únicamente
comprensible a los verdaderos adeptos. Estos trabajos no profanan
los misterios del velo de Isis con imprudentes revelaciones.
El iniciado que es digno y que está versado en la historia del
hermetismo, de sus doctrinas, de sus ritos, de sus ceremonias y
de sus jeroglíficos, puede penetrar la secreta y real significación
de los símbolos ofrecidos a la meditación del hombre o mujer de
deseo. Los Martinistas se dejan entrever, pero no al simple curioso;
es una escuela de alto hermetismo que se descubre a muy pocas personas,
prefiriendo la calidad a la cantidad. Estanislao de Guaita en sus
recordados discursos, desarrolló la doctrina de que la iniciación
es el resultado de una enseñanza; pero que en ella existe un crecimiento
personal que es fundamental. Cualquier poder conocido por la naturaleza
o la sociedad, debe desarrollarse para ser útil; además, debe adaptarse
a la función de aquellos que ha de beneficiar, es decir, el Martinismo
es flexible adaptable a la realidad en la que se va a desenvolver,
sea que este determinada por las personas, por los pueblos o condiciones
de ellos y las circunstancias en que se encuentre.
Al parecer, en los primeros años del Martinismo se les conoció
como la Escuela de los Filósofos Desconocidos que, según Eliphas
Lévi, habría sido fundada por Martínez de Pasqually continuada por
Louis Claude de Saint-Martin, quien habría incorporado a los últimos
adeptos de la verdadera iniciación. Saint-Martin estaba familiarizado
con la antigua clave del Tarot, es decir, el misterio del los alfabetos
sagrados y los jeroglíficos hieráticos.
Dejó muchos pentáculos curiosísimos jamás grabados. Uno de ellos
fue la clave tradicional de la Gran Obra. Los Martinistas fueron
los últimos cristianos de la hueste de los grandes iluminados y
fueron ellos quienes iniciaron a Cazotte. A fines del siglo XIX
y comiences del XX, el Martinismo dejó de ser conocido y fluyó como
una débil corriente de agua, así lo describe Eliphas Levi; sin embargo,
contó entre sus filas con personajes tan brillantes como: Chaptal.
Henry Delaage y Constantin Chevillon. La influencia que había perdido
fue recuperada gracias a Willermoz (como hemos dicho fue discípulo
de Pasqually quien había centrados sus actividades en lyon) Las
enseñanzas se transmitieron secretamente y como resultado, en el
año 1887, se empezaron a reunir los grupos Martinistas.
La Orden pudo consolidarse debido al genio de Gerard Encausse
(Papus), el que la va a reorganizar y le va a dar un nuevo impulso
con sus estatutos y reglamentos. Papus crea el Consejo de las Ordenes
Martinistas integrado por Estanislao de Guaita, Barlet, Chaboseau,
Marc Harven y otros Martinistas de la época. La orden entra en trabajos
secretos y estrictamente herméticos al enfrentar la Primera Guerra
Mundial. Para eso se mantuvo liderando la orden desde 1891 hasta
cerca de los inicios de esta guerra; posteriormente va a ser presidida
por Chaboseau hasta su muerte en el año 1946, en plena Segunda Guerra
Mundial.
Los trabajos durante las dos guerras mundiales fueron estrictamente
herméticos, más aún siendo el Morfinismo una orden secreta. Los
verdaderos Martinistas no publicitan sus actividades; incluso una
de sus obligaciones y juramentos cuando son acéptenlos en la orden
es: Nunca traicionar el nombre Del Maestro que cumplió la iniciación.
Elías Buchelli fue un eminente Martinista de gran importancia
para América.
Creó el "Anuario Astrológico Americano" en el año 1934, en el
que escribían, preferentemente, iniciados rosacruces,
Martinistas
y masones; algunos de ellos muy conocidos por los actuales
Martinistas;
el mismo Elías Buchelli fue un Maestro masón, Martinista y rosacruz
Otros connotados Martinistas fueron: el Dr. R. Swinburne Clymer,
Supremo Gran Maestro de la Federación Rosacruces en América; León
Tournier, Maestro Iniciador de la Orden Martinista; C. Chevillon
Gran Maestro de la Orden Martinista y Rector de la Rosa Cruz Cabalística
en Francia en lyon Ouspesnsky y otros iniciados.
A LA GLORIA DE ESTOS GRANDES SERES POR SU ENTREGA
Y HERENCIA DEJADA EN EL AMOR CONSTRUCTIVO PARTICIPE E INGENIEROS
DE LA MAGIA ELEMENTAL Y DIVINA PARA LA HUMANIDAD…
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