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Friday, May 13, 2022

Antecedentes Históricos Relevantes en el Desarrollo Evolutivo del Ritual Emulación

 

ANTECEDENTES HISTÓRICOS RELEVANTES

EN EL DESARROLLO EVOLUTIVO

DEL RITUAL EMULACIÓN


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ORGANIZACIÓN DE LA MASONERÍA OPERATIVA LAICA

Los constructores legos se reunían en asambleas que se denominaban Hutten, Logen, Lodgins y los miembros tomaron el nombre de masons.
Durante la edad Media los masones ingleses estuvieron sometidos a muchas dificultades y adversidades, por las repetidas invasiones de pictos, daneses, sajones y escoceses, los que dificultaban la realización de los trabajos.
En el año 926 e.·.v.·. se verificó en la ciudad de York una Asamblea General que promulgó la primera Constitución Masónica para Inglaterra y se estima que es el documento más antiguo de la orden hasta hoy conocido. Esta Constitución ha sido considerada siempre como la Ley fundamental de la masonería inglesa. Pero también digamos que se originó el denominado “The York Problem”.
Otro de los importantes sucesos que posibilitaron el desarrollo evolutivo de la masonería operativa en Europa fue el que ocurrió en la ciudad alemana de Estrasburgo, cuando Erwin de Steinbach, el arquitecto de la Catedral de dicha ciudad, convocó a que se reuniesen un gran número de masones arquitectos de Alemania, Inglaterra e Italia en el año 1275.
Se promulgó un código de reglamentos y se organizó la fraternidad emulando la Asamblea realizada en York unos trescientos cincuenta años atrás.
Se reconocieron tres clases de artífices: Maestros o Jefes de Obras, Compañeros del Oficio y Aprendices, junto con ellos se establecieron los signos de reconocimiento que fueron adoptados por los masones ingleses.
En el Siglo XVII la masonería operativa había adquirido tal desarrollo evolutivo que la Fraternidad era a la vez gremio, sindicato, escuela y cofradía.
Sin embargo, pronto el período de esplendor culminaría conjuntamente con la terminación de las últimas catedrales.

NACIMIENTO DE LA MASONERÍA ESPECULATIVA.

En el siglo VII en Inglaterra y Escocia la cofradía de los masones de obras comenzó a aceptar miembros honorarios que se denominaron “Theorical Mason”, “Gentry” o “Accepted Masons”.
Para los operativos la Obra eran su motivo de vida, el sustento, la tradición familiar en muchos casos, en tanto que para los especulativos la Masonería era la Taberna, el lugar de los discursos, de las disertaciones sobre arte y ciencia, el ámbito ideal para las historias, los relatos de viajes, las leyendas, en suma una Gran Asamblea de hombres animados e inspirados por un intenso humanismo fraternal, en el cual el sectarismo religioso o las ponencias políticas de la época no tenían cabida en el seno de cada Logia.
Se han escrito muchos libros, se han presentado numerosas teorías sobre nuestros orígenes y se habla en tono doctoral que la masonería especulativa nace como un reavivamiento de la alicaída masonería de obras.
En las transacciones de Quatuor Cononati Lodge y las investigaciones de los archivos de la Compañía de Masones de Londres no existe evidencia de actividades concertadas para tal reavivamiento. Por el contrario, demuestran que en un mismo edifico coexistieron tres organizaciones: los masones operativos de la compañía de Londres, los “masons” (masones especulativos locales) y los “freemasons” (masones especulativos viajeros).
Se fija el 24 de junio de 1717 como el inicio de la masonería especulativa lo cual no es exacto, hay evidencia en actas de la compañía de Masones de Londres que demuestra una data muy anterior.
La participación de los masones especulativos o el nexo de los Gentry con los masones operativos se encuentran en las disertaciones sobre ciencia de la construcción y el arte, también en soporte financiero a modo de mutual que los masones aceptados brindaban a los operativos y sus viudas.
Con la creación de la Gran logia de Londres en 1717 comienza un proceso evolutivo del ritual y un cisma masónico que enfrentó por 70 años a dos corrientes, la tradicional denominada de los “antiguos” y otra que realizó profundas innovaciones; nos referimos a los masones “modernos” que intentaron descristianizar a la masonería apartándola de sus orígenes.
Los “antient” manifestaron una abierta afinidad con la Gran Logia de York, aunque la verdad sea dicha, los masones conocidos bajo el nombre de Antiguos no tenían vínculo DIRECTO con la Gran Logia de York.
Tal afinidad quedó de manifiesto cuando el Gran Secretario de la Gran Logia Antient Laurence Dermott señaló: “Los antiguos bajo el nombre de Masones libres y Aceptados según las Antiguas Instituciones, y los modernos bajo el nombre de Masones Libres de Inglaterra, a pesar de su similitud de nombres, difieren en exceso en cuanto a hechos, ceremonial, conocimiento, lenguaje masónico e instalación, tanto que siempre han sido y lo siguen siendo, dos distintas sociedades totalmente independientes entre sí”.
“Un masón moderno puede comunicar todos sus secretos a un Antiguo Masón y estar seguro, pero un Masón Antiguo no puede, con igual seguridad, comunicar todos sus secretos a uno Moderno sin la Ceremonia Correspondiente.
Pues igual que una Ciencia comprende a un Arte, así es como la Masonería antigua contiene todo lo que de valor hay entre los modernos, así como muchas otras cosas que no pueden ser reveladas sin ceremonias adicionales”.

FUENTES CRISTIANAS DEL RITUAL DE EMULACIÓN Y
LOS ORÍGENES MONÁSTICOS DE LA FRANCMASONERÍA INGLESA,
GERMEN DEL CISMA MASÓNICO INGLÉS.

Volvamos pues tras nuestros pasos. Parece un total contrasentido a la luz de la historia de las Ordenes Sacerdotales monacales señalar que la masonería es racionalista y alejada del factor religioso, tesis sustentada por la corriente latina de preferencia belga y francesa irregular.
En efecto, los relatos de la construcción del Templo de Salomón en particular por Beda, el Venerable de la Orden Benedictina es un gran aporte al estudio de nuestras raíces especulativas y al ritual de Emulación. Tal vez esto sea novedoso para mucho de mis hermanos y un descubrimiento. Nada de aquello a la luz lo que deliberadamente se oculta; nuestras raíces.
En el libro benedictino “De Templo Salomonis Liber" podemos encontrar conexiones directas con nuestro ritual.
El Templo de Salomón mirado desde la óptica de las Ordenes Monacales es también el símbolo de Jesucristo hombre, Jeshua Adonai, mediador entre Dios y la Humanidad. Para el Venerable Beda, Jesús, el Cristo, es la Piedra angular “cimentada en los cimientos” y la piedra que los constructores dejaron tirada en el camino.
Los masones espirituales somos a su vez piedras vivas construidas sobre los cimientos del Templo del Primer y Segundo Templo de Jerusalén.
En el cuarto capítulo del libro en referencia se indica: “A tales piedras en verdad se manda primero se las cuadre, y así cuadradas se las ponga como fundamento. Pues todo lo que ha sido cuadrado, de cualquier manera que se lo tumbe, siempre queda firme. A cuya imagen se asimilan espléndidamente los corazones de los elegidos, quienes han aprendido tanto a mantenerse firmemente en la fe, que por ninguna adversidad, ni siquiera la muerte misma (Transición) pueden ser apartados de la rectitud de estado”.
Hermanos: una piedra viva escuadrada y trabajada sirve para que manos mas expertas las ubiquen donde les corresponde según el Plano de la obra.
Una piedra escuadrada es un masón que practica todas las virtudes Teologales y las virtudes cardinales. Una piedra está viva lo mismo que un hueso, cuando tiene médula, una medula que hiede es por corrupción, un hueso seco es una materia sin vida, sin esencia. La esencia es Dios.
Por eso de estas grandes piedras preciosas bien se dice: “Las que desbastaron los albañiles de Salomón y los albañiles de Hiram, se labraron pues las piedras preciosas, cuando algunos elegidos, por la instrucción y a instancia de los santos, abandonan todo lo que en sí tienen de nocivo e inservible, y, en presencia de su Creador, muestran solo el imperio de la ínsita justicia, como si revelaran la forma a escuadra”. Hablamos derechamente de la aplicación de las herramientas de trabajo en su forma especulativa.
En consecuencia, un masón fiel y verdadero es algo mucho más concreto que un buen hombre, bien inspirado, de gran elocuencia y erudición con gran cantidad de información acumulada. Es una piedra escuadrada viva, útil y necesaria para la Obra.
El Capítulo VIII aborda el misterio de la Cámara del Medio. Su lectura completa frente al cuadro de dibujos del Compañero es una magistral lección.
“Por esta puerta pues ascendemos a la cámara del medio, y del medio al tercero, porque por la fe y los misterios de nuestro Redentor, ascendemos de la vida de la iglesia presente al descanso de las almas, después de la muerte, en día del juicio, a la inmortalidad inclusive del cuerpo, y por un más sublime avance, ingresamos como a un tercer cenáculo, a fin de que vivamos en felicidad perpetua”.
Por otro lado para la mayoría de los escritores medievales, los templos cristianos son una prefiguración de la Jerusalén Celeste; el punto dentro del círculo del globo terráqueo.
El gran aporte de la línea arquitectónica sagrada monacal es que presenta a la arquitectura como la gran herramienta que Dios utiliza para llevar a cabo su plan, de forma tal que la arquitectura terrestre es una continuidad de la celeste, y el simbolismo de la primera se corresponde con la segunda, “como es arriba es abajo”.
Las imágenes de Dios como Gran Arquitecto del Universo midiendo al mundo con un compás, son indicativas que la arquitectura es la herramienta de los Planes del Creador. La simetría, orden, peso medida y proporción son a ojo entrenado una señal que la letra inicial de la Geometría se observa por doquier, es el sello del Divino Arquitecto del cual el masón es como un egregio elegido.
En este mismo sentido, el templo es el reflejo de su obra que con sus piedras, sus elevadas columnas, sus vitrales, su mobiliario litúrgico y sus imágenes y ornamentos, permite al masón de nuestro rito captar la armonía universal que reina en su interior. La obra maravillosa de los arquitectos, jefes de obras, aprendices y compañeros son un libro abierto de una obra trascendente de generaciones futuras.
La consagración, la devoción de las plegarias cotidianas, la luz filtrada a través de los vitrales son más que arte, son promesas, obligaciones y juramentos de un encuentro con la realidad de nuestro ser que vive y convive en dos mundos, el material y lo invisible con sus jerarquías formando un todo de sabiduría, fuerza y belleza.
Por allí circulan algunas imágenes de gran belleza que expresan una verdad: “cuando tu naciste un ángel bajo del cielo” cuando mueras un ángel apretará tu corazón y lo que saldrá con el último suspiro debe ser: echad en Hebreo, ahad en árabe, uno en español. La masonería es centro de unión entre HH. y también con nuestro salvador y redentor.
La influencia del judaísmo, poco explorado y a veces deliberadamente ocultado, se observa con claridad meridiana en el Imperio Carolingio y de allí pasó a la elite del movimiento monástico benedictino. El aporte de Beda en la Inglaterra del siglo VIII es notable, pero ignorada. También se dice poco o nada de la influencia del Venerable Beda con Alcuino de York, el fundador de la Escuela Palatina de tremenda importancia para los Abades del Imperio Carolingio.
Tampoco podemos dejar de lado el aporte de la Orden de Cluny que incorpora a los laicos a la Abadía y reglamenta por vez primera a los “magistri caementarii”, es decir, los maestros albañiles benedictinos.
A nuestro juicio este momento marca el nacimiento de la masonería operativa europea al alero de las Abadías y el surgimiento de un lenguaje simbólico sincrético de los misterios muy cercano a nuestros actuales rituales masónicos.
En nuestro léxico avanzado del adepto masón “misterio” debe ser entendido como forma de trabajo en todo sus sentidos.
Después de la formación de la Gran logia de Londres se colocaban letreros ofreciendo iniciación masónica según tarifa. Circulaban masones por doquier con escuálidos conocimientos iniciáticos recorriendo logias.
Esto trajo como natural consecuencia un relajo y representó un remedo de masonería tradicional con las consecuencias conocidas del cisma.
En abril de 1809 los líderes de los masones “modernos” llegaron al convencimiento que debía ponerse fin al cisma masónico inglés y que la Unión era esencial y fue así como se eliminó la acusación de irregularidad que pesaba respecto de las restantes Logias de otras Grandes Logias que no formaban parte de los registros de los modernos.

LOGIA DE LA RECONCILIACIÓN.

La Logia de la Reconciliación comenzó a poner en práctica los artículos de unión y tenía como miembros dos Grandes Secretarios y nueve hermanos de la corriente “antigua” e igual cantidad de hermanos “modernos”.
Esta Logia se encargó de los pormenores de la Asamblea en que fue ratificada la Unión de las dos Grandes Logias en conflicto y fue encargada de la promulgación y prescripción de un sistema puro y de consenso entre antiguos y modernos que perfeccionara la reconciliación.
También entre sus funciones estructuró el juramento de cada grado (“Obligation”), la Ley, los trabajos, el lenguaje y definió los paramentos masónicos, para que pudiera ser restaurada la Orden Inglesa.
Revisó todos los grados y ceremonias con espíritu de reconciliación y elaboró varios trabajos de instrucción.
Dispuso que cada Logia debiera enviar a su Venerable Maestro y un Vigilante para asistir a las demostraciones de ritual e instrucciones pertinentes.
La Logia de la Reconciliación realizó igualmente demostraciones fuera de Londres especialmente para Logias distantes de la capital.
Debo dejar constancia, para los efectos futuros en materia del ritual masónico inglés, que los asistentes a las demostraciones y reuniones estaban impedidas de tomar notas bajo sanción de expulsión de la Orden.

LOGIA DE LA PROMULGACIÓN.

En octubre de ese año y como parte de las negociaciones se constituyó la LOGIA DE PROMULGACIÓN con características muy singulares.
Tenía como tarea específica la promulgación de los Antiguos Landmarks e instruir a los masones de su Obediencia sobre las alteraciones que se consideraban necesarias para lograr un acercamiento con los masones “antiguos”.
Parece haber consenso unánime que primó el criterio “antiguo” en gran parte de las ceremonias de los tres grados simbólicos, se restituyó el trabajo de piso de los Diáconos y comenzaron las discusiones para aceptar el Real Arco, entre otros puntos de fricción que no podemos tratar en este nivel.
Así claramente los “modernos” se ajustaron a la línea de los “antiguos” y comenzó a cimentarse la unión. El rito practicado en york desmembrado, el ritual descristianizado y el ordenamiento trajo como feliz acontecimiento un ritual Standard de tres grados dejando a la Orden del Real Arco anexada a la Logia, restituyendo lo conocido como masonería pura y antigua de Inglaterra.
Sin embargo, el Ritual inglés trabajado durante el cisma llegó a los EE.UU. y muchos lugares y no se volvió al ritual Standard. En otras oportunidades el ritual fue actualizado según las circunstancias, perdiendo la esencia bíblica.
Una resolución muy importante aprobada por la Logia de la Promulgación declaró que “la instalación del Maestro de las Logias es un Landmark verdadero de la Orden y debe ser observado fielmente”.
En el año 1813 los “modernos” tenían registradas 1.085 Logias en tanto que los “antiguos” registraban 521 autorizaciones, en Inglaterra la proporción de Logias “modernas” versus “Antigua” era 3:2.
Un hecho histórico relevante ayudó a poner fin al cisma masónico ingles.
El Príncipe de Gales, mas tarde Jorge IV fue Gran Maestro de los Modernos entre 1790 y 1813 y en mayo de este último año asume la Gran Maestría su hermano Augustus frederick, Duque de Sussex que era Gran Maestro de los “antiguos” desde 1791 hasta esa fecha.
El duque de Sussex nombró como Diputado a Edward Duque de Kent que fue poco tiempo después electo como Gran Maestro de los “antiguos”.

GRAN LOGIA UNIDA DE LIBRES Y ACEPTADOS MASONES DE INGLATERRA
Y LA CEREMONIA DE UNIÓN GRANDES LOGIAS DE LOS ANTIGUO Y MODERNOS.

El Acta de Unión fue depositada en un arca frente al sitial del Venerable Maestro.
Los miembros de la Logia de la Reconciliación se retiraron temporalmente junto a Hermanos extranjeros a una habitación contigua en donde se les dio a conocer el resultado de las conferencias previas.
A su regreso el Venerable Maestro de esa Logia especial anunció a la Asamblea que “las formas establecidas y convenidas por la Logia de la Reconciliación eran puras y correctas” y que en adelante serían reconocidas como “las únicas formas que observarían y practicarían en la Gran Logia Unida y todas las Logias de su dependencia, hasta que el tiempo no sea más”.
Se procedió a la elección de los miembros de la Gran Logia resultando electo el Duque de Sussex cargo para el cual fue propuesto por el Duque de Kent que antes de la elección era el Gran Maestro de los Antiguos Y EN CONSECUENCIA LE CEDIÓ EN UN GESTO FRATERNAL EL MALLETE RECTOR DE LA ORDEN EN INGLATERRA.
Los miembros electos de la Gran Logia Unida de Inglaterra fueron invitados a pasar frente a la Copa del Amor Fraternal para que a través de todo el mundo se diera a conocer que le fue presentada al Gran Maestro Electo, que bebió por la Paz, la Buena Voluntad, y el Amor Fraternal a través de todo el mundo.
La Gran Logia cerró sus trabajos tras lo cual los Hermanos cenaron en la Taberna de la Corona y el Ancla, presidida por el Gran Maestro Electo.
El primer Gran Maestro de la Gran Logia Unida de Inglaterra proclamó a la Orden como universal y en consecuencia ordenó retirar toda referencia de sus catecismos y rituales de clara connotación cristiana.
La Unión efectiva se hizo en una Asamblea realizada en el Fremason’s Hall el día de San Juan 27 de Diciembre de 1813.
La disposición de los asientos ocupados fue dispuesta de tal manara que los asistentes quedaron completamente mezclados, uno junto al otro.
Ambas Grandes Logias se reunieron por separados en recintos adyacentes y luego entraron en procesión tomando su lugar a cada lado del sitial del Venerable Maestro.
El Acta de Unión fue leída y ratificada, después vino la proclamación del Capellán: “Sea sabido por todos los Hombres, que el Acta de Unión entre las dos Grandes Logias de los Masones Libres y Aceptados de Inglaterra es solemnemente firmada, sellada, ratificada y confirmada y que las dos Fraternidades son una, que de aquí en adelante será conocida y reconocida por el estilo y título de LA GRAN LOGIA UNIDA DE LOS ANTIGUOS FRANCMASONES LIBRES Y ACEPTADOS DE INGLATERRA

El RITUAL DE EMULACIÓN
THE EMULATION LODGE OF IMPROVEMENT Nº 256

Esta Logia se reunió por primera vez el 5 de Octubre del año 1823 para realizar demostraciones y practicar sin errores el Ritual aprobado por la “LOGIA DE LA RECONCILIACIÓN” el 5 de junio de 1816.
En sus inicios el trabajo masónico de esta Logia consistía en una reunión distendida alrededor de la tabla de trazar (Tracing Board), en la cual los hermanos en forma distendida fumaban y consumían bebidas.
Generalmente el Venerable Maestro le formulaba preguntas del Ritual al Primer Vigilante (Lecture Working) el cual respondía para ilustración de los Hermanos asistentes.
En otras oportunidades las preguntas se formulaban a cada Hermano reunido las cuales contestaban a su turno.
Actualmente esta modalidad se encuentra compilada en un libro conocido como Masonic Lectures que consiste de quince secciones de preguntas y respuestas que contienen en forma secuencial importantes aspectos del ritual y frases claves.
Estos cuestionarios consisten en siete secciones para el Primer Grado, cinco para el Segundo Grado y tres para el Grado de Maestro Masón.
El fundamento de Emulación fue desde su creación impedir las desviaciones e interpretaciones que tendieran a desnaturalizar el Ritual recibido de la Logia de Reconciliación.
Este ritual en opinión de los eruditos e investigadores es la palabra misma desnuda, sin floreos lingüísticos ni incrustaciones de frases o adjetivos para embellecerlo, de forma tal que su interpretación resulte más fácil de aquilatar.
The Emulation Lodge of Improment Nª 256 fue autorizada recién en el año 1969 para publicar la 1ª. Edición del Ritual de Emulación. Existen varias versiones privadas del ritual antes de la fecha consignada de manera que ello demuestra el desconocimiento de varios autores que critican a Emulación señalando que es imposible mantener de memoria por tantos años un ritual sin variaciones.
Esta Logia se reúne cada Viernes de Octubre a Junio en la sede de la Gran Logia Unida de Inglaterra (Freemason’s Hall) ubicada en la calle Great Queen de Londres.
Existe un premio que consiste en un encendedor grabado con el nombre del Maestro Masón que pueda declamar completamente el ritual de Emulación sin errores

EMULATION SILVER MATCH BOX

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CONCLUSIONES

Aunque los orígenes de la masonería no pueden ser establecidos con rigor histórico, no es ilógico considerar que la Masonería Operativa en Inglaterra nace en el seno de los gremios de albañiles que construyeron las grandes catedrales medievales y de su relación estrecha con las Ordenes Sacerdotales Cristianas de Europa.
Los Rituales actualmente usados en Inglaterra corresponden al Ritual autorizado y estandarizado en 1816 por la Logia de la Reconciliación. De forma tal que es perfectamente legítimo referirse a los rituales ingleses como variaciones del ritual de Reconciliación
La importancia del Ritual de Emulación radica en que desde sus inicios ha mantenido invariable una premisa; nadie tiene la autoridad para realizar innovaciones en el texto transmitido.
En consecuencia, se estima que tanto el método de enseñanza aplicado en las Logias de Instrucción como el Ritual editado fueron tan eficaces y efectivos que EMULATION poco difiere de la forma de trabajo sancionada por la Gran Logia Unida de Inglaterra en 1816.
El Antiguo Rito de York, aunque ya no se cultiva en Inglaterra, debe permanecer en los archivos de la historia como el más puro y antiguo de todos los Ritos ingleses y llegó hasta nosotros por la corriente de los masones “antiguos” o masones “Yorkinos” y también por el aporte y defensa de los denominados “Atholl Masons”.
Emulación se caracteriza por la inmutabilidad de su ritual, pulcritud de sus ceremonias conducidas de memoria y por un sistema docente basado precisamente en el ritual.

TODO GIRA EN TORNO AL RITUAL Y A LAS CEREMONIAS por cuanto es un sistema o Ciencia exacta que produce rápidas transformaciones entre quienes lo practican por que tiene esencia.

El ritual y los elementos usados en nuestros trabajos activan centros internos que permiten observar otra dimensión de la realidad, se descubre que en el corazón reside una fuerza de unión que denominamos compañerismo, el ritual trabaja ambos hemisferios cerebrales, el ritual pule el corazón para que refleje la Luz de lo alto.
Por otro lado, deliberadamente el ritual carece de floreos lingüísticos precisamente para que todos comprendan lo que el texto dice sin equívoco. Cada cual al aplicarlo comprobará el grado de efectividad en sus respectivos procesos de auto perfeccionamiento.
Por otra parte, entre los actuales rituales usados por Logias de la Jurisdicción de la Gran Logia Unida de Inglaterra, así como en la mayoría de las Grandes Logias Regulares del Mundo, el Ritual de Emulación es sin dudas el más difundido entre una veintena de Rituales ingleses y se trabaja igual en todos lados.
La masonería pura y antigua de Inglaterra comprende los Grados de todos conocidos y el Real Arco como parte integrante del Grado de Maestro Masón. Formando un todo inseparable e insustituible que solo el Maestro Masón bien preparado de corazón y mente puede comprender; ver la luz prometida en el grado primero es la recompensa del adepto que supo perseverar y esperar el tiempo y las circunstancias.
Los secretos solo se traspasan de boca a oído, como siempre fue y será; a cada cual lo suyo. Cada uno ve lo que tiene que ver. El secreto se oculta y se protege a sí mismo por nuestra ignorancia; está a la vista del que tiene sensibilidad a la Luz.
Yo soy tú y tú eres yo, dice el pueblo del secreto, yo soy el que soy “Ehie asher eihe” dijo la zarza ardiente a Moshé rabeinu.
El masón es lo que es capaz de hacer aplicando las enseñanzas recibidas, y usando el ritual como un instrumento alquímico.
Mientras los miembros fieles y verdaderos de la masonería trabajen el ritual de la forma concebida, será un centro de unión trascendente en todos los planos y logrará la conexión con lo invisible pues “como es arriba es abajo”. Y quien conoce la piedra clave de toque y el nombre, sabrá reverenciar a su Divino Arquitecto que cual suave brisa perfumada de rosa nos acompaña cada día y que muchas veces disfrazado de mendigo con expresiva mirada escrutadora extiende su mano para remecer nuestro corazón.


La Hermandad Para Toda La Humanidad


Tuesday, August 31, 2021

The Silver Matchbox

 

The Silver Matchbox




 



La caja de cerillas de plata El 22 de octubre de 1897 Hno. Mayor R.·.L.·.S.·. Badham, que ocupaba la cátedra, trabajó el segundo grado de una manera descrita como ejemplar por el entonces miembro principal del Comité, el Hno. Robert Clay Sudlow, quien estaba presidiendo en esa ocasión. Posteriormente, Sudlow le presentó una caja de cerillas plateada para marcar el logro; él también, a sus propias expensas hasta que el resto del Comité decidió que debía ser liberado de la carga, hizo presentaciones similares a otros Hermanos que alcanzaron un estándar similar.

En pocos años se había convertido en una costumbre establecida, y un Hermano que realiza una ceremonia desde la Silla “sin necesidad de insinuación o corrección” recibe una caja de cerillas plateada, grabada en el anverso con su nombre y en el reverso con el título "MI. L. de I. " y debajo, la ceremonia en la que ha trabajado, junto con el año (por ejemplo, "2do. grado y T.B. 1975"). Si el Hermano posteriormente realiza una ceremonia diferente sin corrección, que se registra de la misma manera, y si ha trabajado las cuatro ceremonias sin corrección, las palabras “Registro completo” se agregan al pie de la lista. Para calificar, la ceremonia debe ser trabajada por el Maestro sin errores en palabras o acciones.

A finales de abril de 2007, 345 Hermanos habían recibido una caja de fósforos, de los cuales 120 habían logrado un récord completo.

No hay duda de que a lo largo de los años, muchos hermanos se han inspirado para trabajar en Emulation Lodge of Improvement ante la perspectiva de ganar este inusual galardón. Sin embargo, no debe pasarse por alto que una caja de cerillas es solo una indicación de estricta precisión; no dice nada sobre la calidad o lo impresionante de la ceremonia. Muchas ceremonias de palabras perfectas solo pueden describirse como peatonales, mientras que, a la inversa, muchos Hermanos a quienes la caja de fósforos ha eludido hasta el final de sus días en Emulation han realizado ceremonias inspiradoras de las que cualquiera podría estar legítimamente orgulloso.

 

ELIAS ASHMOLE

(1617-1692)


 

ANTICUARIO, ASTRÓLOGO,

ALQUIMISTA Y FRANCMASÓN

 


  

Elías Ashmole (1617-1692), un anticuario inglés que fue de los primeros en otorgar a la arqueología y al estudio integral del hombre y su mundo un valor real y no el de simples “curiosidades”, no se le suele dar la relevancia que ha tenido. Fundador en Oxford del primer Museo de Ciencias Naturales del orbe, donó sus colecciones de plantas, animales y minerales y especialmente las de arqueología y arte y convenció a numerosos amigos para que lo hicieran, siendo tal la importancia de los objetos atesorados que el museo se dividió en dos, pasando la de Arte y Arqueología después de su muerte a llamarse con su nombre.

Se trata del afamado y excelente Ashmolean Museum, de Oxford, que hoy en día exhibe públicamente sus colecciones. Pero no sólo reunió obras de la antigüedad sino textos y libros herméticos que hoy pueden consultarse, así como también escribió (The Way to Bliss, 1658, que recoge sus estudios en Filosofía Hermética según indica en su introducción al lector; Institutions, Laws and Ceremonies of the Order of the Garter, 1672) y publicó: Fasciculus Chemicus (1650): se trata de la traducción de textos latinos de Alquimia, con su introducción; y el Theatrum Chemicum Britannicum (1652), que contiene las obras de los alquimistas ingleses más importantes. En Oxford y también en Londres Ashmole tuvo un destacadísimo papel; hijo de su época, se entregó a la ciencia experimental como una forma de la magia de las transmutaciones, tal cual numerosos filósofos herméticos.

En ese sentido trató con Astrólogos, Alquimistas, Matemáticos y todo tipo de sabios y dignatarios de la época, junto con los cuales formará la Royal Society de Londres y  la Philosophical Society de Oxford. Sus numerosos amigos y compañeros de toda una vida son nombres de muchísimo relieve, muchos de ellos ligados a la Masonería en sus más altos grados (él mismo, masón, es un punto de confluencia del Hermetismo con ésta), como Christopher Wren, o a la investigación y ejercicio de las Artes Liberales y la Ciencia Sagrada, que conformaron un conjunto de personalidades de un papel fundamental en su tiempo, concretamente en la difusión y práctica de la Tradición Hermética y en la relación de esta con la Masonería.

(Federico González, Tradición Hermética y Masonería: Doctrina, Historia, Actualidad, Ed. Kier, Buenos Aires 2001, págs. 84 y 114, 115).

El estudio cuya 1ª parte hoy publicamos apareció en la revista masónica francesa Villard de Honnecourt Nº 38, 1998 (Revue de la Loge Nationale de Recherches de la G.L.N.F.).


ELIAS ASHMOLE

(1617-1692)

Anticuario, Astrólogo, Alquimista y Francmasón

FRANCIS DELON

 

1ª Parte

La vida de Elías Ashmole transcurre en una época particularmente turbulenta de la historia de Inglaterra, sobre un fondo de luchas políticas y religiosas del que destacan sucesivamente:

Ø  la prolongada rivalidad entre Carlos I y el Parlamento, que se clausura con la ejecución del soberano en 1649,

Ø  la dictadura de Cromwell, la Restauración de Carlos II en 1660,

Ø  la Revolución de 1688, que da lugar a la caída del muy católico Jacobo II y el advenimiento de su hija María y de su esposo Guillermo III de Orange, que arruina definitivamente las tesis de los partidarios del absolutismo monárquico.

Sin embargo, como constata uno de los contemporáneos de Ashmole, el célebre biógrafo y anticuario John Aubrey (1626-1697), la mayoría de la clase culta permanecía fiel, en medio de estos desórdenes y de estos cambios de situación incesantes, al principio enunciado por Aristóteles, a saber que “el primer principio de toda acción es el ocio.”

Numerosos intelectuales se apasionaron por el estudio de las matemáticas, de la ciencia, de la astrología, de la alquimia y de otras doctas disciplinas. Ellos constituyeron el vivero de reclutamiento de la Royal Society que acogió en su seno a estos eruditos curiosos y ávidos de saber.

Entre este grupo se destaca más particularmente la personalidad de Ashmole, debido al Journal que llevó, en el cual refiere sus diferentes experiencias, especialmente su recepción en una logia masónica en Warrington, el 16 de octubre de 1646. El manuscrito original de este Journal se halla hoy en la Bodleian Library de Oxford bajo el título, Memorias del erudito Anticuario Elías Ashmole, Esquire, compuesto por él mismo bajo la forma de un diario con un apéndice de cartas originales. Estas memorias fueron publicadas por primera vez en 1717 por Charles Borman, hijastro o yerno de Robert Plot, primer conservador del Ashmolean Museum de Oxford. Una segunda edición, con numerosas erratas, vio la luz en 1774. En los años 1920 se hicieron otras reimpresiones.


Bosquejo biográfico

Elías Ashmole nació el 23 de mayo de 1617 en Lichfield, en el Staffordshire, al norte de Birmingham y a seis millas del río Trent, en un lugar denominado actualmente Breadmarket Street situado cerca de la única catedral de Inglaterra que posee tres agujas. Su familia, representativa de la pequeña burguesía campesina, había adquirido, tras el desempeño de diversas funciones en la administración local en el curso de las generaciones anteriores, una posición por la cual se le reconocida su condición de “gentleman” y muy probablemente el poder de ostentar blasón. Su abuelo Tomás, desaparecido en 1620, había ejercido la primera magistratura de la Ciudad y del Condado. En cambio, su padre Simón (muerto en 1643), del que fue hijo único, hombre honesto y de un trato agradable, había aprendido el oficio de guarnicionero. Sin embargo, más atraído por la carrera de las armas, pasó numerosos años en el extranjero, primero en Irlanda en 1599 con el conde de Essex, después con el hijo de éste, que le dio prueba de una cierta estima, en el Palatinado. Esta profesión de soldado, que fue la causa de numerosas vicisitudes en el plano financiero, alteró gravemente la posición social de la familia.

Su madre, de nombre Ana, pertenecía por parte de su padre Tomás, burgués y pañero de Coventry, a una vieja familia del Staffordshire, los Bowyer de Knipersley. Estaba emparentada igualmente con James Pagitt, un barón del Ajedrez (tesorero) que se había casado en segundas nupcias con su hermana. Los Bowyer tenían igualmente antepasados comunes con los Mainwaring, una influyente familia del Cheshire, un condado vecino. Esta mujer, discreta y virtuosa, era además especialmente instruida en teología, historia y poesía. Una epidemia de peste se la llevó el 8 o el 9 de julio de 1646, cinco días antes de la toma de Lichfield por las fuerzas del Parlamento. Vuelto para rendirle los últimos homenajes, Elías Ashmole pudo ver a los “cabezas redondas” ensañarse con los archivos y las obras de arte de la catedral, logrando él mismo salvar algunas obras de la biblioteca.

El nombre escogido por sus padres, Elías, llamaba la atención por su originalidad. Ningún miembro de la familia lo había llevado antes. Su padrino Thomas Offey, sacristán de la iglesia catedral, podría haberse sensibilizado con una profecía en boga entonces, según la cual el advenimiento de la Nueva Era estaría precedido por la vuelta de Elías Artista, el regenerador de la naturaleza. La  influencia familiar, debida a que una hermana del barón Pagitt se había casado en primeras nupcias con el doctor Masters, el Canciller de Lichfield, y después con su sucesor el doctor Twisden, le permitió hacer humanidades en la Grammar School de la ciudad. Entró también en el coro de la catedral donde aprendió a tocar el órgano bajo la dirección del titular del instrumento, Henri Hinde. En 1633, a los dieciséis años, fue admitido en la Sociedad de Guanteros y Guarnicioneros de la ciudad al manifestar, de forma engañosa, su interés por abrazar la misma carrera que su padre y que su abuelo. Sin embargo, consiguió reunirse rápidamente con el barón Pagitt en Londres, donde continuó sus estudios de música, preparándose al mismo tiempo para la carrera jurídica. En 1638, las relaciones de su protector le permitieron obtener un cargo de solicitor (procurador).

El mismo año, con solo 21 años, se casa, como lo indica con fecha de 27 de marzo en su Journal:

“Me casé con Leonor Mainwaring, hija primogénita de Mr. Peter Mainwaring (y de Juana su esposa) de Smalewood. Resultó una esposa excelente y virtuosa. La boda fue celebrada en la iglesia San-Benito, cerca del muelle de San-Pablo, por Mr Adams Parsom.”

Leonor parece haber pasado la mayor parte de su vida de casada en la casa de su padre en Smallwood. Elías Ashmole la visitaba aquí regularmente vinculándose así a la región, a su familia y a su numerosa parentela. Su suegro, que pertenecía a una de las familias más representativas del Cheshire, resultó ser también primo hermano del coronel Henry Mainwaring de Karmincham, en cuya compañía debía ser recibido en la Logia de Warrington. Los Mainwaring son descendientes de un linaje anglo- normando establecido cerca de la pequeña ciudad de Arques-la-Bataille. Su nombre original (Guarenne o Varenne) fue anglicanizado en Waren, Warin, después Waring; Main-Waring significa la casa de los Waring. El cartulario del monasterio de Dieulacres menciona a un Roger de Meinwarin concediendo a los monjes cistercienses “libre acceso a su bosque de Pevere” (Peover)

Al comienzo del siglo XIV, un maestro albañil llamado Warin es responsable de los albañiles que trabajan en el taller del castillo de Beeston, en el Cheshire. La iglesia familiar de San- Lorenzo, situada en Peover, encierra igualmente un cierto número de bellas tumbas en alabastro esculpidas por los albañiles-libres.

En diciembre de 1641, como lo relata en su Journal, Ashmole perdió desgraciadamente a su esposa encinta de su segundo hijo, el primero muerto al nacer:

“5-6 diciembre 1641. Mi tierna esposa cayó repentinamente enferma al anochecer y murió (a mi gran pesar y al de todos sus amigos) la noche siguiente hacia las 9h. 00.

8 diciembre 1641. Fue enterrada en la iglesia de Astbury, en el Cheshire.”

Residiendo por aquel entonces en Londres, no fue informado de su fallecimiento hasta su llegada a Lichfield el 16 de diciembre; no pudiendo recogerse sobre su tumba hasta el 16 de enero siguiente.

En 1639, Ashmole recibió el encargo del barón de Kinderton, en el Cheshire, de la gestión de sus asuntos jurídicos. Dos años más tarde, el 11 de febrero de 1641, prestó juramento como procurador en la Corte de Common Pleas, el Tribunal de los Plaids Communs, encargado de las diferencias entre particulares.

En 1642, cuando estalla la guerra civil, desaprobando los poderes que el Alto Parlamento se había arrogado, escoge el campo monárquico y vuelve al Cheshire donde desempeñará diferentes misiones. En mayo de 1644 es designado por el rey Carlos I, en compañía de otros dos Comisarios, como responsable de la percepción de los impuestos indirectos para el Staffordshire y la ciudad de Lichfield. Estas nuevas responsabilidades le llevan a Oxford, donde traba amistad con el capitán, más tarde Sir, George Wharton quien le consigue una plaza en artillería transmitiéndole su pasión por la alquimia y la astrología. Destinado, de mayo a diciembre de 1645, a la defensa de las murallas orientales de la ciudad, frecuenta el Brasenose College donde estudia filosofía natural, matemáticas, astronomía y astrología. El 16 de diciembre de 1645 es elegido, con Mr. Swengfield, responsable para la percepción de los impuestos indirectos de Worcester, y once días más tarde presta juramento en compañía de su colega y del alcalde Mr. Jordan. El 22 de marzo de 1646, bajo la recomendación de John Heydon, obtiene la graduación de capitán de artillería en el regimiento de Lord Ashley, y poco después, en junio, el cargo de inspector de artillería de la ciudad. Un mes más tarde, el 24 de julio, Worcester debe rendirse a las fuerzas del parlamento y Ashmole es autorizado a retirarse al Cheshire. Marcha entonces a reponer fuerzas a casa de su suegro. Tres meses más tarde se hace franc-masón.

En el curso del año 1647, se retira a Englefield, en el Berkshire, donde consagra sus días al estudio, especialmente de la botánica, lo que le lleva a escribir en su Journal:

“16 junio - 13h. 00: Dios ha querido ponerme en la condición que siempre he deseado, que es que sea capaz de vivir para mí mismo y los estudios, sin que me vea forzado a darme mal para ganarme la vida.”

Su estancia le permitió conocer a Lady Mainwaring, emparentada con su difunta esposa. Con un primogénito de veinte años, Lady Mary era la hija única de Sir William Forster de Aldermaston, en el Berkshire. La desaparición prematura de sus tres primeros maridos, Sir Edmond Stafford, Mr. Hamlyn y Sir Thomas Mainwaring, uno de los Maestros de la Cancillería donde Ashmole había comenzado su carrera profesional, le había dejado a la cabeza de los vastos dominios que debían normalmente recaer en los hijos nacidos de sus diferentes uniones. Así pues, estos no veían sin inquietud cómo Ashmole hacía la corte solícita a su madre. El 30 de julio de 1647, su segundo hijo, Mr. Humphrey Stafford, irrumpió en su habitación, con la firme intención de matarlo, cuando estaba gravemente enfermo abatido por una violenta fiebre, juzgada mortal según todas las opiniones autorizadas.

Después de una larga resistencia, Lady Mainwaring acabó por ceder y, el 16 de noviembre de 1649, concedió su mano al tenaz pretendiente. La ayuda y los consejos de Ashmole le permitieron, después de numerosos procesos, tomar posesión de sus tierras de Bradfield, en el Berkshire, que codiciaban igualmente la familia Stafford que multiplicó en vano recursos y enjuiciamientos.

Sin embargo, este matrimonio no tuvo éxito pues, en octubre de 1657, Lady Mainwaring intentó una demanda de separación acompañada de la concesión de una pensión alimenticia. Su queja fue rechazada por el juez, Mr. Sargeant Maynard, que no encontró ninguna prueba susceptible de apoyar la acusación en las ochocientas páginas de declaraciones que había hecho llegar a la Corte. Así pues, volvió a vivir con su marido hasta su muerte acaecida el 1 de abril de 1668.

Algunos meses después, el 3 de noviembre, Ashmole se volvió a casar con una mujer mucho más joven, Isabel Dugdale, hija de su amigo Sir William Dugdale (1605- 1686). Este, considerado por otra parte como el medievalista más célebre del siglo XVII, es el autor de una compilación de cartas de los monasterios del otro lado del Canal de la Mancha, el Monasticon Anglicanum (tres volúmenes en 1655, 1661, 1673), así como del primer estudio científico de la historia de un condado, las Antiquities of Warwickshire (1656), y de un análisis pionero de la feudalidad inglesa, el Baronage (1675-1676). La ceremonia tuvo lugar en una capilla de Lincoln, oficiando el Dr. William Floyd, futuro obispo de Worcester.

Su fidelidad a la causa de los Estuardo le valió, desde el advenimiento de Carlos II, el beneficio del favor real. Así, el 18 de junio de 1660, tuvo el honor de conversar con el soberano, quien le otorgó el cargo de Windsor Herald (heraldo de armas de Windsor). Hasta 1671, desempeñaría las funciones de secretario y tesorero de este Colegio, encargado de verificar las genealogías de las familias nobles y su derecho a ostentar blasón durante las visitas regulares que duraron hasta el fin del siglo XVII.

Ashmole llamó entonces la atención del monarca sobre la situación catastrófica de la catedral de Lichfield, que, a excepción del cabildo y de la sacristía, estaba arruinada, presentándole un gravado particularmente realista de Hollard, extraído de la Church History of Britain de Tomás Fuller, publicado a su costa en 1655. El rey intervino inmediatamente para que Ashmole pudiese apresurar su reconstrucción. Durante los tres años siguientes, habiendo fomentado el nombramiento del obispo Hacket para vigilar la obra, donó sucesivamente las cantidades de veinte libras, diez libras y treinta libras, así como un gran cáliz de plata, sin contar las donaciones regulares en favor de los pobres.

Dos misiones específicas le fueron igualmente confiadas en los meses que siguieron a la restauración. En primer lugar, fue encargado de realizar un catálogo de las medallas del Gabinete Real, y además llevó la investigación sobre la desaparición de tesoros inestimables de la Biblioteca Real durante la dictadura de Cromwell. A pesar de toda su diligencia, no llegó sin embargo a probar la culpabilidad del bibliotecario de la época, Hugh Peters, acusado de haber vendido obras únicas en su género a  aficionados ilustrados del continente.

En 1661, los altos favores de que gozaba le permitieron ser nombrado por el Lord Alto Tesorero, conde de Southampton, inspector de impuestos indirectos. El mismo año, el favor de la Corona le abrió las puertas de la Royal Society, sita en el Colegio de Gresham, acogiéndole entre los 118 fundadores, para participar en “la empresa de fundar un Colegio para la Promoción de la Enseñanza Experimental de la Física y de las Matemáticas.”

Las actas del año 1663 hacen mención de los agradecimientos que le fueron expresados por la Sociedad por su dibujo del escudo de armas, inspirado en la tercera visión del profeta Amós: la plomada sostenida por la mano del Señor. Sin embargo, no parece que asistiese a las sesiones semanales de la Royal Society más que seis veces entre 1661 y 1682, si bien la falta de registros de presencia permite hacer relativo la realidad de este juicio.

Desde 1655, Ashmole había comenzado, con la ayuda del Decano de Windsor, a redactar una historia minuciosa y exhaustiva de la Orden de la Jarretera. La obra, que apareció en 1671 bajo el título The Institutes, Laws and Ceremonies of the Order of the Garter (Las Instituciones, Leyes y Ceremonias de la Orden de la Jarretera), le valió la estima de las altas personalidades y de los soberanos miembros de este cenáculo caballeresco. Sin embargo, declinó la distinción de Garter King-at-Arms (Rey de Armas de la Orden de la Jarretera), en favor de su suegro William Dudgdale que recibió el título de caballero, y dimitió de su cargo de Windsor Herald, recibiendo no obstante 400 libras de renta.

En 1675, se instaló en South Lambeth, al sur de Londres, cerca de la propiedad de su viejo amigo John Tradescant, la cual adquiriría tres años después.

En 1685, al advenimiento de Jacobo II, el colegio municipal de Lichfield le propuso para diputado en los Comunes. Este honor le conmovió especialmente. Sin embargo, el rey se opuso a su candidatura, ya que había prometido el cargo a uno de sus favoritos, y le requirió para que se retirase.

Sus últimos años se vieron ensombrecidos por la enfermedad. Falleció el 18 de mayo de 1692 y fue enterrado en la iglesia Santa-María de South Lambeth, bajo una losa de mármol negro con la siguiente inscripción en latín:

“Aquí reposa el renombrado y muy erudito

Elías Ashmole, Bearer of Arms,

Nativo de Lichfield. Entre sus numerosas funciones:

Comisario de Contribuciones indirectas,

Inspector de Artillería,

Heraldo titular de Windsor,

Y durante numerosos años, eminente dignatario.

Dos mujeres le precedieron en la tumba.

Tomó una tercera, Isabel, hija de Sir

William Dugdale,

Rey de armas de la Jarretera.

Murió el 18 de mayo de 1692 a la edad de 76 años.

Su celebridad sobrevivirá tanto como Su museo en Oxford,”

A modo de homenaje, su amigo John Aubrey, que le conoció bien, dijo simplemente que “era un hombre inmensamente bueno.”

Su biblioteca, que comprendía alrededor de 780 libros impresos y 130 manuscritos, fue dispersada en subastas públicas el 22 de febrero de 1693.


La Franc-Masonería en el Diario de Ashmole


La primera mención, con fecha 16 de octubre de 1646, se refiere a la recepción de Ashmole en la Logia sita en Warrington, en la diócesis de Chester, plaza fuerte parlamentaria situada a medio camino de Manchester y de Liverpool sobre uno de los meandros del río Mersey y a solamente ocho millas de Smallwood cuna de los Mainwaring. Esta parte septentrional del Staffordshire, donde predomina un paisaje de landas coronadas por crestas de areniscas, se ha forjado desde el neolítico una vocación de “paisaje oculto con vocación espiritual”, como testimonia la sima que ha pasado a la posteridad bajo el nombre de iglesia de Lug, o el imponente dolmen de Gawton Stone sito en el bosque de Knipersley. Al comienzo del siglo XIII, los discípulos de san Bernardo, seducidos por estos desiertos austeros, implantaron, por iniciativa de los señores locales transformados por la experiencia de la cruzada, tres monasterios cistercienses: Croxden, al sur, fundado por el cruzado Bertram de Verdon en 1176, Dieulacres, al noreste, fundado por el cruzado Ranalphus de Chester en  1214, y Hulton, al sudoeste, fundado por el caballero Henry de Audley en 1223 sobre tierras contiguas al priorato templario de Keele creado en 1168. Con la disolución de las órdenes religiosas por Enrique VIII en 1534 (“el Gran Diluvio” como anota Ashmole en su Journal), el saber adquirido y la maestría técnica se volvieron a encontrar en la construcción de las bellas mansiones de los patricios del condado, los cuales estaban a favor de la apertura al mundo exterior de los Sancta, esos cenáculos secretos de los monasterios, como lo menciona Cyril N. Batham en su artículo sobre The origin of Freemasonry, a new theory, publicado en los A.Q.C. 106 (1993). Así, una cierta forma de actividad constructiva perduró en el Staffordshire. Los registros  de la iglesia de Biddulph, antigua dependencia de la abadía cisterciense de Dieulacres, mencionan, pero solamente por un año, la profesión de los feligreses que recurrieron a los servicios de su rector:

“1600. Baptismata. Mar 6, Joanna, fa(ther). Rumbaldi Dubar, albañil-libre.” Conviene fijarse ahora en el origen social de los diferentes protagonistas.

“1646. 16 octubre. 16h30. Fui hecho Franc-Masón en Warrington, en el Lancashire, con el coronel Henry Mainwaring de Karmincham, en el Cheshire. Los miembros que componían entonces la Logia eran: Mr. Rich. Penket, Vigilante, Mr. James Collier, Mr. Rich. Sankey, Henry Littler, John Ellam, Rich. Ellam y Hugh Brewer.”

El otro profano es el coronel Henry Mainwaring de Karmincham (1608-1674), perteneciente a una vieja familia del Cheshire donde su presencia es testimoniada desde la segunda mitad del siglo XV. Los Mainwaring son una rama de una reputada familia del Condado, los Mainwaring de Peover. La tierra de Karmincham, situada a unas 8 millas al sudoeste de Macclesfield, a 55 millas al noroeste de Congleton, y, sobretodo, a 4 millas de Smallwood, había sido comprada por Randle Mainwaring de Peover para su hijo Randle. Uno de sus descendientes, Henry, fue sheriff del Cheshire en 1575 y dejó la propiedad a su hijo, llamado igualmente Henry, hacia 1617-1618. Este fue autorizado, por decisión de la justicia, a construir una capilla colateral en la iglesia de San-Lucas de Goostrey, dependiente en otro tiempo de la abadía de Dieulacres, para que sirviese de sepultura a su familia. Su hijo, el coronel, debía tomar posesión de ésta a la muerte de su padre en 1638.

Muy implicado en los asuntos locales, Henry Mainwaring ocupó los cargos de juez de paz, cuando las sesiones trimestrales, y de diputado lugarteniente y comisario de la milicia, los cuales le permitieron dominar perfectamente los rudimentos del arte militar, e imponerse después como uno de los mejores jefes militares salidos de las filas parlamentarias de la comarca.

Al comienzo de la guerra civil, se hicieron tentativas tanto en el Cheshire como en el Lancashire para preservar la neutralidad existente. Así, en diciembre de 1642,  se firmó un tratado, llamado de Bunbury, para preservar la paz en el Cheshire mediante la disolución de las compañías de las dos facciones, por el lado monárquico, la de Lord Kilmorrey y Orlando Bridgeman, hijo del obispo de Chester, y por el lado parlamentario, la de los dos diputados lugartenientes, el coronel Mainwaring y Mr. Marbury de Marbury. Sin embargo, debido a que los monárquicos reforzaron sus tropas y a su negativa de desmantelar las nuevas fortificaciones que habían erigido en Chester, este acuerdo fracasó.

En marzo de 1643, Mainwaring fue encargado de la defensa de Macclesfield, asumiendo después funciones administrativas en tanto que miembro de la comisión de evaluación y como administrador de las propiedades confiscadas a los partidarios del rey (la mitad del Condado).

Al comienzo de la primavera de 1644, debió batirse en retirada en Stockport, en compañía del coronel Duckinfield, ante la ofensiva del Príncipe Ruperto, primo de Carlos I y jefe de la caballería monárquica. En mayo del mismo año, en Nantwich, plaza fuerte parlamentaria que solamente la intervención inesperada del general Fairfax permitió salvar, una orden del parlamento decidió su reemplazo por Sir William Brereton, uno de los dos diputados del Cheshire, llamado de nuevo para la circunstancia de Westminster, y su vuelta al puesto anterior de diputado lugarteniente. Sin embargo, debido a los disturbios ocasionados por los movimientos del Príncipe Ruperto, permaneció a la cabeza de su regimiento hasta su disolución en abril de 1645. Si sus oficiales permanecieron después en activo, él prefirió por su parte retirarse a sus tierras de Karmincham. En 1672, transmitió la propiedad a su nieto Roger y se instaló en su pequeña posesión de Blackden, cerca de Goostrey, donde murió en diciembre de 1684. El reverendo Henry Newcome, cuñado de Ashmole, a quien éste llamaba mi “Hermano”, menciona en su autobiografía que asistió a sus exequias.

El Vigilante, y verosímilmente el maestro-de-obra de la ceremonia, Richard Penketh, pertenecía a la vieja familia de los Penket o Penketh, cuyo nombre provenía de un pueblo y de una casa señorial situados a tres millas de Warrington en el camino de Liverpool. Los Penketh de Penketh, miembros de la pequeña nobleza, tenían esas tierras de los señores de Warrington, los Boteler, desde aproximadamente 1242. Hacia 1280, Gilbert y Robert de Penketh eran los señores de la propiedad. En 1487 se hace notar el fallecimiento de un Hermano, Thomas Penketh, en el convento de San Agustín de Warrington. En la Visita de Inspección de 1613, la familia reivindica un linaje de doce generaciones. Un Richard Penketh, muerto en 1570, se había casado con una de las hijas de Thomas Sankey de Sankey. Otro Penketh, John, sacerdote católico, figura entre los alumnos del Colegio inglés de Roma, en 1651. Las convicciones monárquicas de la familia y su fidelidad a la causa de Carlos I perjudicaron gravemente su fortuna, viéndose reducida, hacia 1680, a una condición de las más modestas, no poseyendo apenas más de cinco acres. Numerosos Penketh están presentes en los registros parroquiales de las iglesias de Warrington y de Farnworth. Sin embargo, debido a un uso particularmente frecuente entre ellos del nombre Richard, existen cuatro hipótesis plausibles para identificar al organizador de la recepción de 1646:

1.     Richard Penketh, muerto en 1652, que se había casado en Warrington el 11 de junio de 1591 con María Etow, y fue el último propietario del dominio familiar;

2.     Richard, hijo de Richard Penketh bautizado en Warrington el 16 de junio de 1602;

3.     Richard, hijo de John Penketh, bautizado en Warrington el 23 de diciembre de 1606;

4.     Richard, hijo de Richard Penketh, gentleman, bautizado en Fanworth (la iglesia de la familia) el 23 de octubre de 1614.

Richard Sankey pertenecía, como los Penketh, a una familia muy antigua cuyo nombre provenía de un pueblo situado entre Warrington y Penketh. Esta poseía tierras en el Pequeño Sankey, situado en la parroquia de Warrington, y en el Gran Sankey, dependiente de la de Prescot. Tenía igualmente sus propiedades de los señores de Warrington, los Boteler. Así, en 1490, Randle Sankey se dirigió a Bewsey Hall para rendir homenaje a Sir Thomas Boteler, decimoquinto señor de Warrington, y pagarle los diez shillings adeudados.

En 1631, Richard Sankey fue multado con diez libras por no haber cumplido sus obligaciones de caballero con ocasión de la coronación de Carlos I.

Los Sankey, por su pertenencia a la fe católica, fueron acusados en 1584 de amparar a un sacerdote proscripto y fueron objeto de un registro. Francis Sankey (1604-1663) perteneció al movimiento de los Santos-Apóstoles de Suffolk, mientras que sus hermanos, Lawrence y William, abrazaron el estado eclesiástico.

En 1625, Sir Thomas Ireland, el sucesor al señorío de Warrington de los Boteler, desaparecidos sin herederos en 1585, dejó en su testamento 40 libras a  Edward Sankey al cual había administrado los bienes, en tanto que tutor, desde la muerte de su padre en 1602. El 22 de noviembre de 1639, Edward Sankey presentó una petición ante la Cancillería con el fin de verificar la gestión de la tutela de sus propiedades. Partidario del Parlamento, se enroló seguidamente como capitán en el regimiento de caballería de Sir William Brereton y participó en el sitio de Warrington.

Se encuentra varios Sankey en los registros parroquiales de Warrington. Del Richard susceptible de haber participado en la ceremonia, no se conoce más que la fecha de fallecimiento, septiembre de 1667.

Además, se utilizó una versión de los Old Charges, conocida hoy bajo el nombre de Manuscrit Sloane Nº 3848, para la recepción de los dos profanos. El Edward Sankey que hizo la copia podría ser o el capitán de las fuerzas parlamentarias, o el mismo hijo de Richard Sankey, nacido el 3 de febrero de 1621.

James Collier, quien poseía tierras en el sector de Newton-Le-Willows y de Winwick, en el norte de Warrington, se había casado por primera vez con Elen Bretherton, que pertenecía a una vieja familia del Lancashire, y posteriormente, el 13 de junio de 1640, con Isabel Stanley, nieta de Sir Randle Mainwaring de Peover. Capitán en las fuerzas del rey al comienzo de la guerra civil, fue hecho prisionero en Stafford, cuando la toma de la ciudad por Sir William Brereton, en 1643.

En 1646, formuló una petición ante el Parlamento en la que recordaba que su condición de servidor de Lord Derby, de quien tenía una parte de propiedades, le había llevado al campo monárquico; y que como no disponía más que de una renta anual de 24 libras, después del pillaje de su casa y la confiscación de sus bienes, solicitaba una reducción del montante de su multa.

Por otra parte, el testamento que redactó en 1666 fue homologado solamente en 1673. Murió poco tiempo después, y fue enterrado el 17 de enero de 1674 como lo menciona el registro de la iglesia de Winwick.

Oriundo de Warrington y perteneciente a una familia establecida en el Cheshire desde varias generaciones, Henry Littler, muerto en 1673, ejercía la profesión de comerciante y se había casado, el 31 de agosto de 1630, con María Dunbabin quien falleció en 1644. Intervino posteriormente como oficial representando al señor, y más tarde se le impuso una multa por haber rehusado ejercer una segunda vez esta función.

Es muy probable que la ceremonia fuese organizada en su casa, a no ser que se llevara a cabo en una de las cinco posadas de la ciudad.

Por otra parte, en los registros parroquiales de Warrington, entre 1627 y 1690, están censados once Brewer. Hugh Brewer sería posiblemente aquel que habría servido, con el grado de sargento mayor, en el regimiento monárquico de Lord Derby en 1642, y que habría sido enterrado en 1658.

Por fin, la familia Ellam es mencionada en los registros de Winwick y de Croft, y también en los de Warrington, entre 1602 y 1687, y en el registro de Farworth entre 1581 y 1660. John y Richard Ellam eran pequeños propietarios oriundos de Lymm instalados desde hacía mucho tiempo en la parroquia de Winwick. En efecto, las últimas voluntades de Richard, con fecha del 7 de septiembre de 1667, empezaban así:

“En el nombre de Dios Amén. Yo Richard Ellam de Lymm, Condado de Chester, Franc-Masón, estando enfermo y débil de cuerpo. Mi envoltura carnal deberá recibir una sepultura cristiana en mi iglesia parroquial de Lymm.”

Para H. Boscow, autor de un artículo sobre “The Background to 16 October 1646” publicado en los A.Q.C. 102 (1989), la mención de Richard Ellam de su cualidad de Masón significa verosímilmente que era un masón operativo*. En efecto, numerosas personas precisaban la naturaleza de sus actividades en sus testamentos. Así, en los registros de la iglesia de Farworth se puede leer la inscripción siguiente:

“27 de enero de 1640. Enterrado Richard Ellam de Widness, albañil.”

La persona anterior, John Gryce, enterrado en diciembre de 1639 y la persona siguiente, Tho. Johnson, enterrado el 31 de enero de 1640 son mencionados igualmente como albañiles. El reconocimiento de un parentesco entre Richard Ellam de Lymm y Richard Ellam de Widness fortalecería la hipótesis de su pertenencia a la masonería  operativa**   y  la  posibilidad  de  la  existencia,  en  el  sector  de  Warrington- Widness, de una Logia de masones operativos.

Así, el examen de las biografías de los siete gentlemen que formaban la Logia, la cualidad de albañil reivindicada por Richard Ellam que hace referencia más que a otra cosa a su condición de empresario o contratista, y la condición de los dos candidatos muestra con evidencia que ninguno de ellos tenía relación con la masonería operativa stricto sensu ni con la construcción y la arquitectura. El examen de los registros parroquiales viene por otra parte a confirmar que no figuraba ningún “Masón” entre los artesanos de las dos principales arterias comerciales de la ciudad, Bridge Street y Church Street. La Logia fue pues puramente ocasional y se constituyó únicamente para la recepción de los dos profanos, como lo indica igualmente la copia del Manuscrit Sloane Nº 3848 efectuada algunos días antes. En efecto, la Logia más antigua de la que se tiene testimonio en Warrington es la Logia Nº 40, que recibió una patente de los Antiguos el 20 de agosto de 1755 y que interrumpió sus trabajos al cabo de un año. La Masonería no tomó realmente impulso en la ciudad más que con la creación en 1765, bajo la égida de la Gran Logia de los Modernos, de una Logia inscrita bajo el Nº 352. Esta tomó, en 1806, el nombre de “Lodge of Lights” (Logia de las Luces) y tiene hoy el Nº 148. El tercer taller, “Gilbert Greenwall Nº 1250”, no apareció más que en 1869. La presencia, en el seno de una misma estructura en plena guerra civil, de personas que pertenecían a lados opuestos (Ashmole, que no había escondido nunca su hostilidad hacia la causa parlamentaria, debía más tarde transcribir el informe oficial de la condenación de Carlos I) traduce quizás la necesidad sentida por ciertos miembros ilustrados, tanto de la gentry del Cheshire como de la del Lancashire donde predominaban desde el desencadenamiento de la guerra civil los valores de compromiso y de moderación, de reencontrarse en el seno de una sociedad en armonía.

En lo que concierne a la naturaleza de la ceremonia, Richard Sandbach, en un artículo sobre The Origin of Species – The Freemason publicado en los A.Q.C. 108 (1995), se apoya en la obra del Dr. Robert Plot, Histoire naturelle du Staffordshire (1686), para mostrar, no sin exageración, que esas ceremonias se desarrollaban en numerosas localidades del país y estaban “extendidas un poco por todas partes en nuestra nación”, y añade que “personas del más alto rango (...) no desdeñaban ser de esta compañía”.

Señala igualmente que lo esencial de la recepción, después de la comida pagada por el candidato, consistía en la comunicación de “ciertos signos secretos, por los cuales se reconocían entre ellos en toda la nación, lo que les permite obtener asistencia por todas partes donde van.

Se extiende seguidamente sobre los deberes de cada Masón, “obligado, en cualquier lugar o compañía que pueda estar, a acudir a él (otro Masón) en seguida, ya fuese de lo alto de un campanario (por peligroso o incómodo que esto pueda resultarle), para saber lo que desea o para asistirlo.”

Menciona por fin la existencia “de un gran rollo de pergamino (...) que contiene la historia y los reglamentos del oficio de masonería” correspondiente a los Old  Charges.

Así, la parte principal de la ceremonia consistía en la comunicación de signos de reconocimiento que, cuando eran correctamente intercambiados, permitían a un extranjero obtener auxilio y asistencia en una época donde el país se hallaba a dos pasos de la anarquía. En efecto, el rey estaba prisionero por el ejército escocés en Newcastle-upon-Tyne mientras que en Londres, al que Ashmole se aprestaba a regresar, el Parlamento victorioso y un poco fanático reforzaba vigorosamente la legislación penal en materia religiosa.

La segunda, y última alusión a la Franc-Masonería en el Journal de Ashmole tiene lugar treinta y cinco años después de su recepción.

“10 marzo 1682. Alrededor de las 17h.00. He recibido una convocatoria para ir a una Logia que se va a reunir mañana, en la Casa del Gremio de los Albañiles de Londres.

En consecuencia, he acudido. Fueron admitidos en la Fraternidad de los Franc- Masones: Sir William Wilson, Capt. Rich. Borchwick, Mr Will Woodman, Mr Wm Grey y Mr William Wise. Yo era el más antiguo entre ellos (hacía aproximadamente treinta y cinco años que había sido recibido). Estaban además igualmente presentes:

Mr Thos Wise, Mr (=Maestro) de la Compañía del Gremio de los Albañiles este año, Mr Thomas Shorthose, Mr Thomas Shadbolt, Wainsford, gentleman, Mr Rich Young, Mr John Shorthose, Mr William Hamon, Mr John Thompson y Mr Will. Stanton.

Cenamos en la Taberna de la Media-Luna donde había sido preparada una cena selecta a cargo de los Masones recién admitidos.”

El largo intervalo que va de 1646 a 1682 no permite en modo alguno suponer que Ashmole se desinteresase de la Franc-Masonería, pues su Journal, que no es de ninguna manera un inventario exhaustivo de sus actividades, es igualmente silencioso sobre asuntos de igual importancia. La mención de 1682 significa solamente que era conocido como Masón, y por lo tanto para ser convocado a una tenida.

El lugar de la reunión, en esta ocasión la Casa del Gremio de los Albañiles, se explica ciertamente por el hecho de que ciertos miembros de la Logia pertenecían igualmente a la Compañía del Gremio de los Albañiles de Londres, como Mr Thomas Wise. Los dos Vigilantes, John Shorthose y William Stanton, son mencionados igualmente en  los registros de la catedral de San-Pablo. Por fin, uno de los postulantes, Sir William Wilson, nacido en 1641 en Sutton Coldfield, a ocho millas de Lichfield, y desaparecido a los setenta años, era un amigo de Ashmole. Albañil de formación, ejerció después como arquitecto. Su casamiento con la viuda de uno de sus colegas, Henry Putney, le permitió obtener el título de caballero. Entre sus obras, se puede citar el castillo de Nottingham y la estatua de Carlos II, situada sobre la fachada occidental de la catedral de Lichfield, cuyo pedestal se adorna con la inscripción “El Restaurador”, alusión no velada al guardián y defensor de los privilegios y la tradición de la Iglesia de Inglaterra.

El Dr John Campbell (1708-1775), en su artículo sobre Ashmole que apareció en 1747 en la Biographica Britannica, sostiene que numerosos manuscritos reunidos por éste, con la intención de escribir una historia de la Masonería entre los siglos XIV y XVII, desaparecieron el 26 de enero de 1679 cuando el incendio que destruyó el Middle Temple de la Royal Society donde tenía su gabinete:

“En lo que concierne a la historia antigua de los Franc-Masones, respecto de la cual estamos deseosos de saber lo que se conoce con certeza, puedo deciros solamente que, si nuestro digno hermano E. Ashmole Esq. hubiese llevado a bien su proyecto, nuestra fraternidad se habría hallado con respecto a él tan deudora como los miembros de la muy noble Orden de la Jarretera.”

Además, en los 1860 manuscritos censados de Ashmole, solamente se encuentra otras dos menciones de su interés por asuntos de orden constructivo.

Ø  Ms Ashmole, 1, 125, f.11v.-12v – copia de un contrato entre, por una parte, George Talbott, Lord Steward, Gilles Daubeney, Lord Chamberlayn y Sir Thomas Lovell (en nombre del rey) y los Caballeros de la Jarretera, y, por otra parte, John Hylmer y William Vertue, “albañiles-libres”, en el cual se precisa el trabajo a hacer en la restauración y la decoración del coro de la Capilla de Windsor.

Ø  Ms Rawlinson, 807, D, f.79 – notas de Ashmole acerca de una obra de John Lighfoote: The Temple: especially as it stood in the dayes of our Saviour, London, 1650. Estos extractos dan las medidas del segundo templo de Jerusalén, con referencias al templo de Salomón.

Por fin, en una conferencia sobre la “Freemasonry, Hermetic Thought and the Royal Society of London” ante la Quatuor Coronati Lodge Nº 2076, el 27 de junio de 1996, Michael Baigent pone el acento sobre una sátira de las sociedades esotéricas publicada en la edición del 10 de octubre de 1676 del “Poor Robin's Intelligence”, una revista londinense, donde se menciona especialmente que

“la Cábala Moderna de la Cinta Verde, la Antigua Fraternidad de la Rosa-Cruz, los Adeptos Herméticos y la Compañía del Gremio de los Albañiles aceptados tienen la intención de cenar juntos (...). Han pedido, para que se sirva en esta ocasión, surtido de patés de cisne negro, huevos de fénix pochés y pernil de unicornio.”

Por primera vez, una guilda profesional, en esta ocasión la del Gremio de los Albañiles, volvía a situarse en el seno de un medio hermético (Rosa-Cruz, Adeptos Herméticos) y antipapista. Bajo la denominación de “Cábala Moderna de la Cinta Verde” se disimulaba de hecho una sociedad secreta anti-católica opuesta al advenimiento del futuro Jacobo II Estuardo, el “Club de la Cinta Verde”, cuyos miembros, en el curso de sus ceremonias, se vestían de sacerdotes y reducían simbólicamente a cenizas al Papa.

La clave de esta evolución habría que buscarla en el movimiento intelectual y científico que llevó a la fundación de la Royal Society al final de la guerra civil en 1661. Uno de sus miembros, después su primer historiador, Thomas Sprat, que terminó su carrera en la sede episcopal de Rochester, abogaba, en su obra sobre The History of the Royal Society of London aparecida en 1667, en favor de “una unión entre manuales e intelectuales”, añadiendo:

“Tenemos así una visión excepcional de la nación inglesa, a saber que hombres de pensamientos y de modos de vida antagónicos olvidan sus odios y se reúnen para el progreso de la ciencia. Pues, el soldado, el comerciante, el marchante, el erudito, el gentilhombre, el cortesano, el presbiteriano, el papista, el librepensador y los adeptos

de la religión oficial han abandonado su hacer específico y trabajan con serenidad en práctica y en espíritu...”


2ª Parte 

El apasionado por la alquimia

Como se ha dicho ya, en el curso de la guerra civil, en 1644, Ashmole entabló amistad con el capitán Georges Wharton (1617-1681) quien hizo nacer en él el deseo de estudiar astrología. Hijo de un herrero, fue educado por parientes ricos, estudiando matemáticas y astronomía en Oxford. Se hizo astrólogo profesional, y publicó un Almanach annuel de 1641 a 1660. En esta época de disturbios, Wharton repartía su tiempo entre la polémica que mantenía con un astrólogo muy reputado, William Lilly, y escribir feroces libelos contra la dictadura de Cromwell. Uno de sus escritos, donde denunciaba vigorosamente a los “usurpadores”, le llevó, el 21 de noviembre de 1649, a la prisión de Gatehouse, en Westminster, pesando sobre él la amenaza de una grave condena por ofensa al gobierno. Ashmole solicitó entonces la ayuda de Lilly. Este, a pesar de la animosidad que Wharton le tenía, obtuvo su liberación, gracias a la intervención de su protector Mr Whitlock, con la condición de que no escribiese más panfletos contra el Parlamento y el Estado. En su Hemeroscopia, el capitán agradeció a Lilly su bondad, y otorgó a Ashmole el calificativo de oaken friend por haber sido el instrumento principal de su liberación y haberle nombrado intendente de su propiedad de Bradfield a fin de sacarle de sus dificultades financieras. Para corresponderle, Wharton le dedicó uno de sus más bellos poemas:

“A su muy valeroso amigo y eminente astrólogo, el capitán Wharton, con ocasión de su encarcelamiento”.

Después de la Restauración, obtuvo un empleo permanente del gobierno y un título de barón.

En el otoño de 1646, a su regreso a Londres, Ashmole tuvo la oportunidad de conocer a los tres astrólogos más renombrados de la época: al comienzo de octubre, a Moore; el 25 de este mes, a Lilly; y el 3 de diciembre, a Booker. William Lilly (1602-1681) era un antiguo doméstico que había llegado a ser un mago renombrado que predecía los acontecimientos, con resultados varios, por medio de un almanaque anual, el Merlinus Anglicus. Publicó igualmente numerosos panfletos, entre los que destaca Monarchy or no Monarchy in England (1651). Terminó su carrera como  médico de la  villa de Hersham,  cerca de Walton-upon-Thames. John Booker (1603-1667), por su parte, era un antiguo aprendiz de carpintero que había llegado a ser uno de los más grandes astrólogos de la época. Ashmole compraría posteriormente las bibliotecas de estos dos últimos cuando el cumplimiento de sus sucesiones. Una profunda amistad intelectual parece haberle ligado a Lilly ya que, solamente algunas semanas después de su encuentro, le dedicó un poema con ocasión de la publicación de su Astrología cristiana:

“Sois nuestro Atlas inglés sobre quien reposa la notable reputación de la astrología (...). Nos enseñáis lo que Egipto, Grecia, Arabia y el mundo oriental han  transmitido bajo el sello del secreto”.

Nada se transparenta, en cambio, en su Journal de su encuentro con Robert Fludd, el 7 de marzo de 1651, excepto que éste le dedicó en 1656 la traducción inglesa que acababa de hacer de una obra del alquimista Michael Maier sobre la Hermandad de la Rosa-Cruz en estos términos:

“Al filósofo único de la época.”

Sin embargo, lo que determinó a Ashmole a frecuentar los medios herméticos fue la amistad que sostuvo al comienzo de los años 1650 con William Backhouse (1593- 1662), gentilhombre oriundo de Swallowfield, en el Bershire, y, sobre todo, químico de talento y auténtico rosa-cruz, como lo menciona Wood en su Athenae Oxon. Backhouse, además de los numerosos conocimientos científicos que le transmitió, lo adoptó como hijo, como lo anota en su Journal el 26 de abril de 1651:

“Mr William Backhouse me autorizó a llamarle en adelante Padre.”

Menos de dos meses más tarde, el 10 de junio, escribe:

“Mr Backhouse me declaró que debía ahora hacerme su hijo porque tenía que comunicarme numerosos secretos.”

Esta transmisión tuvo lugar el 13 de mayo de 1653:

“Mi padre Backhouse, estando en cama en Fleet Street, cerca de la iglesia de St Dustan, y no sabiendo si iba a sobrevivir o morir, me reveló, de manera silábica, la verdadera naturaleza de la piedra filosofal que me dejó en herencia.”

El impacto de este suceso sobre Ashmole queda reflejado en un poema que escribió poco tiempo después y del cual se conserva una copia manuscrita en el Ashmolean Museum. Está dedicado a “mi muy digno y muy honorable William Backhouse de parte de su hijo adoptivo.”

En este texto, Ashmole revela haber pasado una prueba de iniciación hermética bajo el cayado de su maestro.

“A partir de este instante bendito comenzó para mí

Un año de dicha... y juraría

Que no he percibido jamás hasta ahora la existencia.

Mira cuánto el poder dado por tu adopción puede

Transmutar una naturaleza imperfecta en hombre.

Siento brotar en mi corazón esta noble sangre

Que me da derecho a una infinita parte

De las... riquezas de Hermes...

Ya que mi grosero Mercurio se ha transmutado en oro.”

Acaba después su homenaje pidiendo a las estrellas que le pongan

“... en la buena dirección que guiará

La mano de mi padre y su bendición sobre mi cabeza

Y la dejará reposar.

Que me sea concedido que las hojas del árbol de Hermes

Cubran la desnudez de la ceniza;

Que su legado de un par de ojos te sea de economía,

Oh tú miope topo,

Y que (aunque joven hijo) me haga su heredero.”

Así, con esta mención de la ceniza y del topo, Ashmole hace claramente referencia a sí mismo en tanto que ser desprovisto de conocimiento y privado de inteligencia hasta la bendición hermética de su padre adoptivo Backhouse.

Según William Sandys, autor de una Pequeña Historia de la Franc-Masonería y del artículo dedicado a Ashmole en la Encyclopaedia Metropolitana, una sociedad de rosa-cruces se habría constituido en Londres, a mediados de los años 1640, sobre el modelo de las fundadas en Alemania al comienzo del siglo XVII. Una copia manuscrita del primer manifiesto rosa-cruz, la Fama Fraternitatis, conservado en la Bodleian Library, contiene una ferviente petición dirigida por Ashmole a los “muy ilustrados Hermanos de la Rosa-Cruz” donde les hace saber su deseo de ser admitido en la Fraternidad, cuya realidad ha sido recientemente negada por los trabajos del Dr Carlos Gilly y de Roland Edighoffer.

Ashmole es igualmente el autor de un cierto número de obras consagradas a la filosofía hermética.

En 1650, publica bajo el seudónimo de James Hasolle el Fasciculus Chymicus, traducido por el hijo del ilustre John Dee, Arthur (1579-1651), médico en la Secret Hermetical Science. El frontispicio, que se presenta bajo la forma de una columna adornada con instrumentos de música, reglas e instrumentos de las ciencias matemáticas, testimonia la competencia musical del autor, sus lazos con la Masonería y las funciones militares que ejerció. La publicación de su Theatrum Chemicum Britannicum o Annotations on Several Pieces of our Famous English Philosophers who have made Hermetic Mysteries in their own ancient language vio la luz en 1652. Desde la introducción, declara que el alquimista “no se alegra en tanto que puede hacer oro y plata... sino en entrever las Puertas del Cielo.”

Habiéndole sido necesario el conocimiento del hebreo para la elaboración de esta obra que debía, en principio, componerse de varios volúmenes, adquirió los rudimentos necesarios del mismo junto al Rabbin Salomon Frank.

Entre sus otros escritos, conviene mencionar, en 1638, La Vía hacia la Beatitud, tratado en prosa sobre la “Piedra filosofal”, y el prefacio a un manuscrito de Nicolás Bowden consagrado a este mismo tema.


Un bienhechor de la Universidad de Oxford

Elías Ashmole aprovechó una estancia en Oxford, en 1646, donde le habían llevado sus funciones de Comisario de Contribuciones indirectas, para frecuentar el Brasenose College y darse así al estudio de las ciencias, especialmente la filosofía natural, las matemáticas y la astronomía. La calidad de sus primeras publicaciones le permitió, en 1653, conocer a eminentes científicos como el Dr Langlaine, Principal del Queen's College, o el jurista y teólogo John Selden (1584-1654). En 1658, fue encargado de establecer un catálogo descriptivo de la colección de monedas legadas a la Biblioteca de la Universidad por el antiguo arzobispo de Canterbury, William Laud, decapitado en 1645 por su fidelidad a Carlos I Estuardo. En noviembre de 1669, el Dr Yates le entregó solemnemente el diploma de “Doctor en Física”.

En 1679, Ashmole ofreció a la Universidad de Oxford su inestimable colección de medallas, monedas, pinturas, manuscritos, obras impresas y curiosidades rarísimas, constituida de sus propias adquisiciones y del legado del Museum Tradescantianum.

Los Tradescant eran una familia de botánicos holandeses instalados en Inglaterra desde el siglo XVII, donde introdujeron plantas y árboles extranjeros, especialmente la morera. El primogénito, John, muerto en 1637, había recorrido Africa del Norte y Europa, tomando numerosas muestras de especies varias que conservaba en su casa de South Lambeth. El hijo más joven, llamado igualmente John (1608-1662), aprovechó su cargo de responsable del “Jardín Botánico de Chelsea” para enriquecer su colección. En el curso de los años 1650, simpatizó con Ashmole a quien recibió varias veces en su residencia del sur de Londres.

Según testamento de fecha 4 de mayo de 1661, hizo de su mujer Hester la usufructuaria de su museo con la condición de que ésta lo legara a la Universidad de Oxford o a la de Cambridge. Ashmole demandó enseguida este testamento, arguyendo el hecho de que las colecciones le habían sido legadas en vida por el difunto y que su viuda había destruido o quemado todas las pruebas susceptibles de apoyar sus justas pretensiones. Edward Hyde, primer conde de Clarendon (1609- 1674), uno de los más eminentes servidores de la causa monárquica, Lord Canciller de 1661 a 1667, autorizó finalmente a Ashmole para establecer un catálogo de las colecciones que permanecían en depósito en casa de Madame Tradescant. Dos Windsor Herald estaban encargados de asistirle, Sir Edward Bysshe y Sir William Dugdale, su suegro, así como un magistrado de la Cancillería, Sir William Glassock.

Herida, Lady Tradescant arremetió con calumnias pérfidas contra Ashmole antes de retractarse ante la justicia en 1676 y de autorizarle a tomar posesión de las colecciones de su difunto esposo, amenazando incluso con echarlas a la calle ante sus reticencias. Dos años más tarde, debía desaparecer trágicamente ahogándose en su estanque.

El legado de las colecciones de Ashmole a la Universidad de Oxford establecía, como condición previa, la obligación por parte de ésta de edificar un edificio destinado a recibirlas. La construcción de este primer museo público de las Islas británicas fue confiada a Thomas Wood; su coste alcanzó cerca de las 4500 libras.

El donante formuló él mismo los reglamentos de funcionamiento de su fundación en la que cohabitaban una institución científica y un museo de bellas artes y de arqueología. En la práctica, el edificio se organizó como sigue: en el primer piso, el museo propiamente dicho; en la planta calle, la biblioteca de química y de “filosofía” constituida, en su mayor parte, por los fondos de Ashmole, a los que se añadieron los legados por Sir William Dugdale, John Aubrey y Martín Lister; y en el sótano, el laboratorio de química, el primero de Oxford.

La Universidad nombró al Dr Robert Plot (1640-1696), por otra parte secretario de la Royal Society, primer conservador del Ashmoleam Museum, y le confió igualmente una cátedra de profesor de química. Las presiones ejercidas por la Iglesia anglicana habían impedido la creación de una cátedra Ashmole específicamente dedicada a la química y a la historia natural.

Durante cerca de un siglo y medio, la institución debía conservar su papel de centro de enseñanza de química, anatomía, astronomía, zoología y botánica. En 1845, se construyó un nuevo edificio en Beaumont Street, por Charles Cockerell, que sería ampliado en 1896 con la extensión Fortnum. Desde 1889, detenta el nombre de Ashmolean Museum. El edificio inicial se ha vuelto a rehabilitar como museo de historia de la ciencia, y las colecciones de manuscritos y de impresos han sido transferidas desde 1860 a la Bodleian Library.

Elías Ashmole dejó a sus contemporáneos la imagen de un hombre de carácter irreprochable, de una beneficencia discreta y con conocimientos científicos ciertos. Frances A. Yates, en su obra The Rosicrucian Enlightenment (1972) [El Iluminismo Rosacruz, FCE México 1999], traza por otra parte, p. 235, el siguiente retrato:

“... un monárquico fiel que vivió retirado durante la Guerra Civil y el Commonwealth saciando sus múltiples pasiones; alquimista, anticuario, coleccionista asiduo de testimonios del pasado, las raíces de Ashmole se hallaban en el universo hermético cuando las nuevas ciencias aparecieron. Su interés por la alquimia no estaba pasado de moda sino que reflejaba la impetuosa primavera de esta disciplina en el siglo XVII.”

Las cualidades de Ashmole le permitieron frecuentar personajes importantes, como lo confirma su amistad con William Sancroft, arzobispo de Canterbury desde 1677 hasta su destitución en 1691 y uno de los maestros de obra de la catedral de San Pablo, así como con el duque de Norfolk o el duque de Lauderdale (1616-1682), Lord Alto Comisario en Escocia de 1669 a 1680.

Si aparece bajo la pluma de su biógrafo, el Dr Campbell, con los rasgos de un eminente filósofo, químico y anticuario, se hace necesario sin embargo entender estos términos en el marco del siglo XVII. Así, los calificativos de “químico” y de “alquimista” eran casi sinónimos y Ashmole aparece más como un vulgarizador que como un auténtico sabio. Igualmente, el término “anticuario” designa un espíritu curioso y entusiasta cuya concepción de la historia reposa ante todo en los diversos documentos que ha reunido laboriosamente.

Además, el pastor James Anderson, en la segunda edición de sus Constituciones en 1738 (tercera parte, Historia de la Masonería en Gran Bretaña desde la Unión de las dos Coronas hasta hoy, cap. 1. El estilo de Augusto en Inglaterra desde la Unión de las Coronas en 1603 hasta la Restauración de 1660), menciona brevemente, p. 100, su pertenencia masónica:

“Pero incluso durante esas guerras, los masones se reunieron ocasionalmente en diversos lugares: así Elías Ashmole escribe, p. 15 de su Journal: fui recibido franc- masón en Warrington, Lancashire, así como el coronel Mainwaring, por Richard Penket, Vigilante de los Compañeros (sigue la lista) el 16 de octubre de 1646.”

Por fin, puede ser interesante subrayar la ligereza con la que un texto francés de finales del siglo XVIII, conservado en la Biblioteca Municipal de Chartres, Notice sur la Franche-Maçonnerie, da cuenta de la recepción de Ashmole:

“En 1679, Henry Bernet siendo G.M., el célebre Elías Ashmole, filósofo, químico y anticuario distinguido, fundador del museo de Afort, fue recibido mas. Este hace en sus memorias el elogio más completo de la sociedad de la que era miembro, confirmando todo lo que es referido aquí arriba sobre la antigüedad, la ciencia, y los misterios de la sana moral de la más.”

Traducción: Miguel A. Aguirre


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·         A publicarse: PAGE Brian (Pasado Diputado Bibliotecario y Conservador de la Gran Logia Unida de Inglaterra): Elias Ashmole, the first recorded English Freemason, Prestonian Lecture for 1998, Grand Loge News, 10 diciembre 1997, p. 2