EL ARCA DE LA ALIANZA
Manly Palmer Hall
Uno de los símbolos más interesantes que han llegado hasta nosotros desde la antigüedad es el del Arca, o la caja que se dice que contenía las reliquias sagradas. Mucha gente cree que pertenece particularmente a la nación judía, pero es un gran error, porque ha sido el derecho de nacimiento de todos los países tener el Arca. Todas las naciones, como el pueblo judío, perdieron gran parte de su poder y gloria cuando perdieron el Arca sagrada. En la antigua Caldea y Fenicia, el Arca era bien conocida. La India la celebra como el Loto, y los antiguos Egipcios explican cómo el dios de la luna, Osiris fue encerrado en un arca. En todas las Religiones de Misterio del mundo, individualmente y cósmicamente, el arca representa la fuente principal de la sabiduría. Sobre la Shekinah se cierne de gloria, como una columna de fuego por la noche y una columna de humo durante el día. Cada país ha visto y sentido su presencia cuando los Reyes Sacerdotes e Iniciados sacaron de una antigua civilización, perdida a causa de la cristalización, el Arca sagrada, y rodeada de los fieles a la verdad se la llevan a otras tierras y pueblos.
En todos los credos y religiones encontramos la cristalización. Nos encontramos con pequeños grupos de gente que se separan de su hermano el hombre. Encontramos a aquellos que, aferrándose a lo viejo, se niegan a avanzar con lo nuevo y cada vez que nos encontramos con esta cristalización, nos encontramos con el espíritu de verdad llevado a otras personas y encarnada en otras doctrinas. El Arca antigua de los israelitas nunca fue retirado de las varas, el cual fue llevado y trasladado, hasta que finalmente se colocó en el templo de Salomón. Ni tampoco descansa el fuego espiritual del hombre hasta que finalmente está entronizado en el lugar sagrado de su templo solar. Sus portadores llevan esta verdad sagrada siempre en dirección al sol naciente.
Las naciones nacen de quienes aman la verdad, y son enterradas cuando la olvidan. Llego el momento en que sus portadores silenciosos tomaron el Arca sagrada y la gloria de Shekinah, y en fila solemne cruzaron las aguas y las llevaron al nuevo mundo. La llamada ha sonado a través del universo, y los que son fieles a sus principios más elevados han rodeado el Arca sagrada. Quienes han jurado alianza a su propio ser superior siguen a los sacerdotes y su carga sagrada, y están construyendo un templo hermoso y misterioso en esta bella tierra nuestra, amada y custodiada por aquellos que están trabajando por la humanidad. Las varas todavía están en el Arca, y sin embargo, permanecerán sólo hasta que el verdadero bien pueda realizarse.
La oportunidad la está afrontando ahora el mundo occidental. El conocimiento de los antiguos, la sabiduría de los tiempos está llamando a la puerta y buscando a aquellos que la siguen. Los portadores del Arca se detuvieron y están reuniendo un núcleo de almas espirituales para continuar su trabajo, y la palabra del Señor permanecerá con la nación que dependa de sus propias acciones, y las acciones de una nación son el conjunto de las acciones de sus habitantes. Si aquí no encuentran nada en armonía con sigo mismo, si encuentran pocos que respondan a su llamada, la llamada de servicio y fraternidad, entonces sus sacerdotes levantarán de nuevo las varas y se llevarán la obra sagrada a otras tierras.
La vida de un país que se ha ido de este modo, será absorbida en el olvido como la antigua ciudad de la Puerta Dorada. La llamada está sonando, y los que aman la Verdad, piensan y aprecian la Luz deben unirse a este grupo de servidores que desde hace siglos están dedicados a la preservación de la Verdad. Han dado su vida miles de veces, la felicidad ha sido segundaria para su deber. Ellos son los guardianes de la Palabra Sagrada, y la ley de la atracción les atraen a todos los que aman y viven la Verdad. Les llega una gran afluencia de luz espiritual a los que viven la vida, han aprendido la doctrina, y sin importar el clan o el país se han unido a la fila silenciosa de vigilantes y trabajadores en torno a la sagrada Arca de la Alianza. Cada individuo por sus acciones diarias está expresando más claramente que con palabras sus ideales, sus deseos, y su actitud hacia esta gran obra. La actitud compuesta de un número determinado de personas bien los excluye o los deja entrar en la luz. Por lo tanto, cada individuo tiene un gran deber, un gran trabajo que realizar, y el verdadero estudiante debe dedicar su vida a ello. Entonces a dondequiera que vaya, haga lo que haga, estará siendo guiado, y la gloria de Shekinah dirigirá sus pasos.
En el cerebro del hombre, entre las alas de los querubines hincados, está el propiciatorio, y allí el hombre habla con su Dios, como el sacerdote del tabernáculo habló con el espíritu del Señor flotando entre las alas de los Ángeles. El hombre de nuevo es el Arca, y dentro de él están los tres principios, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, las Tablas de la Ley, la Urna de Maná, y la Vara que Reverdeció. Pero como en el caso de los antiguos israelitas, cuando se cristalizaron, la urna de maná y la vara que reverdeció fueron retiradas del Arca, y lo único que quedó fueron las tablas de la ley. Cuando el individuo cristaliza y excluye diferentes puntos de vista de su mente, excluye la fuerza vital que fluía hacia él. Al rechazar lo desconocido, excluye su propia vida, y todo lo que le queda son las tablas de la ley, las razones materiales por las cuales la vida espiritual se ha ido.
El Templo de Salomón, o el templo del cuerpo humano, el templo del universo perfeccionado, y el templo del alma, finalmente forma el santuario perfecto para el Arca viviente. Allí, en la cabeza de una gran cruz se coloca al hombre y queda fijado permanentemente. Las varas de la polaridad en las que era llevado son removidas, y se convierte en un ser vivo, un lugar permanente donde el hombre conversa con su Dios. Allí el hombre, el sacerdote purificado, vestido con las ropas de su orden, las prendas de su alma, conversa con el espíritu se cierne sobre el Propiciatorio. Esta Arca interior está siempre presente, pero el hombre sólo puede llegar a ella después de haber pasado a través del atrio exterior del Tabernáculo, después de haber pasado por todos los grados de la iniciación, después de haber adoptado la Tercer Grado y se convierta en un Gran Maestro. Entonces y sólo entonces puede entrar en presencia de su Señor, y allí en la cámara oscura, iluminada por las joyas de su coraza, conversa con el Altísimo, la verdadera esencia espiritual en su interior.
Estamos trabajando en esta dirección, y llegará el momento en que cada persona por sí misma conocerá el misterio del Arca, cuando el estudiante a través de la purificación sea llevado a través de la puerta del Lugar Santísimo y esté envuelto por la Luz de la Verdad. Este era su derecho de nacimiento que vendió por un plato de lentejas. “Para esto ha venido al mundo, para dar testimonio de esta verdad, que por medio de esta luz todos los hombres puedan ser salvos.” El Arca, ese gran principio espiritual, rodeado de sus amorosos trabajadores, está llamando a todos a seguirla.
Cuando a través de la materialidad y la degeneración un gran pueblo es destruido o se hunde un continente bajo el océano, entonces aquellos que son verdaderos son llamados en torno al Arca, y como fieles servidores son guiados fuera de la tierra de tinieblas hacia el nuevo mundo y un paraíso prometido. Todas las grandes enseñanzas establecen lo mismo. El estudiante encontrará que eso es verdad, y cuando se alía con los poderes de la Luz, cuando se convierte en un canal para su expresión, y cuando la irradia de sí mismo a todos los que la necesitan, entonces ciertamente será protegido por la Luz y se convertirá en un Sol de Dios.
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